Las recientes lluvias dieron un respiro a ciertos cultivos de granos en el este y otras zonas del país, lo que muestra que este año se tendría una mejoría respecto a lo que fue el 2022 en términos de cosecha. El presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), Héctor Cristaldo, explicó que esta semana es decisiva para contar con un panorama general de la zafra en este 2023.
Cristaldo explicó que si bien “toda lluvia es bienvenida” e incluso “razonable” para dar crecimiento a los cultivos, todavía no llegó a la cantidad necesaria para un mayor impacto positivo para el sector de la agricultura. “Estas lluvias sostienen los cultivos en una línea de producción en la que podamos tener rendimientos razonables, que nos permita una cosecha que nos marque la recuperación, sin ser una cosecha excepcional”, manifestó a Universo 970/Nación Media.
Agregó que si las precipitaciones siguen dándose cada semana “vamos por un buen camino”. Sin embargo, aclaró que hay regiones más afectadas que otras y dio un ejemplo en el que en una ciudad de un radio de 25 kilómetros hubo un reporte de caída de lluvias de entre 1 milímetro hasta 60 milímetros, lo que indica la relatividad de la condición climática.
Contó que persisten muchos “bolsones” de lluvias, pero que en el plano local no tienen incidencias. En ese contexto, refirió que es difícil predecir cómo le irá a la zafra este año, pero que para contar con un panorama general esta semana es crucial, haciendo referencia al comportamiento del clima.
El presidente de la UGP detalló que un buen año que marque la etapa de recuperación debería arrojar una cosecha por encima de los 2.500 kilogramos por hectárea. “Si es por debajo de ese número, va afectar a mucha gente. “Está en veremos si eso ocurre o no. Esto va a determinar el desarrollo del clima y cultivos en estos días que son decisivos”, destacó.