El sector naviero pasa por un periodo difícil teniendo en cuenta que, además de la imposición del peaje en la hidrovía por parte de Argentina, también deben enfrentar la bajada histórica del río Paraguay. Aunque tras las recientes lluvias se registró un ligero aumento de la cota que contabilizó 0,14 metros por debajo del cero, varias embarcaciones al sur de Pilar ya se encuentran varadas.
“Hoy en el km 1.301, un poco al sur de la ciudad de Pilar, tenemos 12 embarcaciones que están esperando que mejoren las condiciones de navegabilidad en el paso”, empezó comentando a la 650 AM Esteban dos Santos, presidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (Cafym). Dijo que la condición es que se colmata el fondo por varios efectos, como la sedimentación natural de las aguas, además de la desembocadura del río Bermejo con la cual se arrastran estas partículas.
Refirió que si se realizan trabajos de dragado de emergencia en la zona, podrían mejorar las condiciones, por ello se aguarda que desde el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) se dé la orden de inicio de las obras, puesto que se cuenta con tres empresas adjudicadas en distintos sectores. “Esto ya se hizo en el pasado, se mejoró la condición del canal y dependiendo del caudal del agua en el momento en el que se hace el trabajo es productivo o no, entonces hay que avanzar con el trabajo día a día”, indicó.
Hasta este momento, las embarcaciones se encuentran con navegación interrumpida y hay otras que están procediendo a realizar el fraccionamiento de barcazas. “En el río navegan estos grandes convoyes, de remolcador troncal con 12, 16, 20, 25 barcazas y lo que hacen es fraccionarlos de 2 o de a 1 barcaza”, comentó. Esto, teniendo en cuenta la limitación de calado de navegación establecida por la Prefectura General Naval, que restringe el volumen de carga de las naves.
Hay que mencionar que Juan Carlos Muñoz, director del gremio, comentó a La Nación/Nación Media, que la coyuntura tendrá indefectiblemente un impacto sobre el costo del flete, por lo que cada empresa ya está realizando la correspondiente evaluación con sus clientes sobre los ajustes que tendrán que hacer en los precios, debido a que no solo se trata de una menor utilización de las bodegas, sino que también se complican los tiempos de los viajes.