El programa de apoyo al empoderamiento económico de las mujeres ya tiene a sus 300 nuevas beneficiarias de la tercera convocatoria, quienes accederán a capital semilla no reembolsable para que puedan desarrollar ideas de negocio o potenciar lo que ya está en marcha por un valor total aproximado de G. 3.600 millones.

Así lo anunció el programa, impulsado por la Misión Técnica de Taiwán como parte del Proyecto de Asistencia a la Recuperación Económica y Empoderamiento de las Mujeres de América Latina y el Caribe en etapa pospandemia, que busca fomentar el empleo, emprendimiento de las mujeres y brindar asistencia técnica de finanzas inclusivas en Paraguay.

Es así que 300 emprendimientos liderados por mujeres empoderadas y guapas de distintos puntos del país dedicadas a una amplia variedad de rubros son beneficiados con capital semilla para fortalecer sus negocios y potenciar el crecimiento continuo del país, pues el programa apuesta a la capacidad productora de las mujeres en la recuperación económica.

“¡Felicitamos a todas y este logro lo celebramos con cada una de ustedes! Les deseamos el mayor de los éxitos, que inicie una nueva etapa de mucha prosperidad y desarrollo económico en sus emprendimientos”, expresó el anuncio del equipo Reemujerpy.

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El fondo consiste en US$ 1.800 para cada proyecto seleccionado, que según al cambio oscila entre los G. 12.000.000 para cada una, con el objetivo de brindar sostenibilidad a través de una inversión en equipamientos y maquinarias que puedan generar productividad y empleo.

Desde el programa destacan los cientos de casos de mujeres emprendedoras que inspiran y que ya pasaron por la asistencia, que solo por citar uno, contaron la historia de Nancy Delvalle, de Encarnación, una de las ganadoras de la segunda convocatoria, a quien califican como una “verdadera kuña guerrera multifacética”, que con mucho esfuerzo y coraje decidió emprender en diversos rubros para salir adelante.

Nancy es emprendedora del rubro gastronómico, se dedica tanto a la confitería, panadería, comidas preparadas, productos agrícolas, avicultura, entre otros, y comercializa sus productos a través de la venta por WhatsApp, a más de ofrecer servicio delivery o retiro del negocio.

Desde pequeña ayudaba en su casa con la elaboración de las comidas que con los años fue perfeccionándose. Hoy en día es madre de un niño de 7 años y trabaja junto con su marido para sacar adelante a su propia familia.

“Al enterarme del capital semilla, me entusiasmé mucho y me inscribí para concursar y aprender todo lo que podía en las capacitaciones. Al culminar el proceso, me notificaron que fui una de las adjudicadas del premio y una gran emoción de felicidad inundó mi alma”.

La beneficiaria remarcó que gracias al capital aumentó sus ventas tras la adquisición de maquinarias que le ayudaron a agilizar la elaboración de los productos y así producir más en menos tiempo, logrando aumentar la clientela.

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