En el marco del Día Mundial del huevo, varios referentes del sector en el país se pronunciaron sobre la situación del rubro y señalan que tras el complicado momento que se vivió hace meses ante el corte en la producción, se observa una relativa estabilidad. No obstante, coinciden en que el contrabando sigue siendo el principal problema.
En comunicación con la 650 AM, Rolando Ramírez, productor e integrante de la asociación señaló que siguen trabajando contra el contrabando que cortó la producción el año pasado. Esa situación había generado un desequilibrio en la suministro que a su vez ocasionó la escasez de este producto en el mercado nacional.
Por su parte, Blanca Ceuppens, empresaria del sector avícola, dijo que el crecimiento que tuvo el contrabando es amplio llegando a la situación en el que incluso se ofrecen estos productos a través de las redes sociales. “Nuestro problema es el contrabando, la cadena de la producción se ha cortado, por eso tuvimos faltantes en meses anteriores”, agregó al referente.
Explicó que el problema es de fondo y cuestionó la falta de patriotismo de la sociedad que comprando productos de contrabando están asumiendo una posición contraria a la producción nacional que finalmente la afecta. Señaló que de una manera general, el país debe apoyar a los productores, no debiendo depender de otros para la alimentación de los paraguayos.
En cuanto a la coyuntura actual, indicó que el país se está deteniendo a la espera de los resultados de las elecciones, lo cual considera que es un tema bastante complicado debido a que nadie busca tomar decisiones para dar una solución a este problema que se viene arrastrando desde el año anterior.
Según estiman, la complicada situación que ocasiona el contrabando al mercado interno genera una pérdida de más de US$ 300 mil por mes. Para Ceuppens, lo primordial ante este panorama es cuidar los puestos de trabajos de los colaboradores, sector que se ve mayormente perjudicado atendiendo a que pueden quedarse sin fuente de ingresos. Sostuvo que no ven mejoras en las condiciones de ventas por lo que siguen faltando acciones concretas para terminar con el flagelo.
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