Luego del rechazo por parte del Senado al proyecto de ley de “estabilización”, más bien conocido como subsidio a los combustibles de Petropar, desde el sector privado, específicamente las Distribuidoras de Combustibles Asociadas del Paraguay (Dicapar), celebran dicha decisión y consideran que fue una medida sensata.
Al respecto, el gerente de Dicapar, Guillermo Parra, se mantuvo en la posición inicial del sector, de que los precios internacionales no permiten reducir los costos de los carburantes que se importan para el mercado local, y consideró que fue positivo este hecho que se produjo el día anterior.
Hay que mencionar que luego de esta medida tomada por la Cámara Alta, la petrolera estatal comunicó que pasaría a reducir los precios en G. 600 de su nafta 93 octanos y en el diésel tipo III desde la medianoche de ayer, además de verse envuelto en la venta de combustibles favoreciendo al vecino país de Bolivia.
“Antes que nada, con relación al rechazo del proyecto de subsidio de Petropar, 34 votos contra 2, creo que fue una medida muy sensata de los senadores, porque volver a incurrir en subsidios de combustibles fósiles no es bueno para el país bajo ninguna circunstancia, y mucho menos si se trata de solo una de las distribuidoras como lo es la estatal de las 21 que estamos”, expresó a la 1020 AM.
Competencia desleal
El referente de las distribuidoras de combustibles refirió que de aprobarse dicho proyecto como se planteó, podría llegar a generar pérdidas al fisco por unos US$ 8 millones, además de volverse una competencia desleal respecto a las demás representantes, violando incluso el Art. N° 107 de la Constitución Nacional.
Parra señaló que también dicho proyecto puede incentivar la circulación de combustibles dentro del mercado negro, y que más bien el planteamiento era fruto de la presión de un sector como lo son los transportistas de carga denominados camioneros, cuyo actuar catalogó como pretensiones infundadas y que ya se están pasando de la raya.
“Yo no sé quién les asesora a ellos, o de dónde sacaron que el combustible se puede bajar de precio sin subsidiar, e incluso ellos estaban dispuestos a que se subsidie, es decir, a ellos no les importa nada con tal de salirse con la suya, y por suerte estos senadores entendieron que no se podía”, agregó.
El gerente del gremio fue tajante al reiterar que hoy los precios internacionales son los que aún no permiten la baja de los combustibles, independientemente al stock con que se cuente, y esta situación se está dando porque cuando tuvo que subir el valor en el mercado local no se aplicó el reajuste necesario porque se usó el costo de stock de abril.
Es así que, según Parra, en Paraguay el gasoil no se llegó a incrementar como tenía que serlo, pues se usó un valor de stock anterior, y que, por ende, algo que no subió no puede bajar. De ahí que no puede entender cómo los sectores que reclaman, a quienes ya en varias mesas de trabajo con técnicos se les explicó el esquema, siguen insistiendo en bajas, por lo que da que pensar que hay algo más allá de las reiteradas medidas de fuerza.