Cada vez más las recomendaciones sobre el estudio del Presupuesto General de la Nación (PGN) 2023 intentan generar conciencia sobre los responsables de sancionar una de las leyes más importantes para el país, más aún teniendo en cuenta el estrecho margen que presentan actualmente las finanzas públicas, y lejos de reducir el déficit fiscal para volver a la convergencia, se proyecta a aumentarlo.
Sobre el punto, el exministro de Hacienda César Barreto manifestó que las incongruencias se dan debido a que el país enfrenta un periodo electoral y que por ello muchos congresistas creen que otorgando beneficios a ciertos sectores, como el funcionariado público, accederán a mayores chances en torno a los intereses políticos.
“Estamos caminando sobre la cornisa, las finanzas públicas están muy debilitadas, el déficit está en US $1.500 millones que tenemos que converger a US $600 millones. Se podría dar el caso del pago selectivo, la última vez que hicimos eso fue en 2002-2003, hace 20 años”, expresó Barreto a la 680 AM.
Sin margen para ampliaciones
Esto, con relación a la serie de peticiones en el Congreso Nacional sobre los aumentos salariales que saltaron en la función pública, que con mucha seguridad dijo que la realidad es que no se podrá cumplir con tales ampliaciones porque no hay ingresos de más y la plata no se puede inventar.
Al respecto, aseveró que es cierto que el Congreso tiene más poder que el Poder Ejecutivo para estos aspectos como la aprobación del PGN y que penosamente hay muchos congresistas que no entienden una conceptualización mínima de la responsabilidad que tienen al estar administrando el Estado.
Es así que no queda de otra al sector privado y la sociedad civil que tener que recurrir a lo mismo que el ministro, tener que “rogarle” a los parlamentarios que no provoquen situaciones desastrosas en la discusión presupuestaria, sentenció el exministro de la cartera económica.