Días atrás, el mercado internacional estuvo realizando ajustes de política monetaria, marcados principalmente como punta inicial de la reunión de la Reserva Federal (Fed) de EEUU, que incluso anuncia más ajustes en lo que va del 2022. En ese marco, analistas locales estiman que el Banco Central del Paraguay (BCP) podría seguir subiendo sus tasas para controlar el precio y evitar la salida de capitales.
El pasado jueves, el Comité de Política Monetaria (CPM) del Banco Central del Paraguay decidió incrementar la tasa de política monetaria (TPM) en 25 puntos básicos, situándose en 8,5%. Entre los aspectos considerados en la decisión de subir la tasa de referencia se encuentran el ajuste de tasas de las economías avanzadas, el deterioro de las perspectivas mundiales para el 2023, la contracción del PMI compuesta de producción global. Así también, se analizó la evolución de los precios internacionales del petróleo y la soja, que se han ido moderando.
En relación con las tasas de inflación en las principales economías avanzadas, estas permanecen elevadas: en Estados Unidos se sitúan en 9,1% y en la Zona Euro en 8,3%, lo que llevó a que las mismas incrementen sus tasas de referencia a 3,25% y 1,25%, respectivamente.
En ese sentido, analistas de Mentu enfatizan que en la misma línea de acción, el BCP podría seguir incrementando la TPM con la intención de controlar la inflación. Sin embargo, sin medidas fiscales complementarias, esto podría limitar el crecimiento del país.
Ritmo a la baja
Por otro lado, la banca matriz viene bajando su ritmo de ajuste al alza de política monetaria en lo que va del año y se prevé que esta tendencia se mantenga, e incluso se puede volver a reducir el año que viene, mencionó en su momento el miembro del directorio del BCP, Humberto Colmán.
El director indicó que desde el año pasado, la banca matriz viene ajustando, pero a un menor ritmo, ya que anteriormente las subas se situaban por arriba del 1%; luego, para este 2022, el ajuste bajó a 0,5% y los últimos dos ajustes fueron de 0,25 puntos. “Probablemente estamos llegando ya a un límite este año, según mi opinión personal. De hecho, las expectativas de los agentes económicos apuntan a un cierre del año, en tasa de política monetaria, en 8,50%, y ya estamos ahí cerca”, explicó.
Por otro lado, destacó que en cuanto a la tasa de inflación, la evolución de la expectativa se mantuvo cerca del 4,5% para el horizonte de política monetaria, lo que es importante para la toma de decisiones. Probablemente, la tendencia se va a ir aminorando, incluso ya está pasando, explicó.