Con más de tres décadas de funcionamiento en el mercado brindando servicios de asistencia integral, desde sus inicios Interasistencia trabajó generando fuentes de trabajo de forma directa e indirecta a más de 300 familias a nivel local. Además con el compromiso y la responsabilidad de apoyar a todos los que trabajan con la empresa y se encuentran en vulnerabilidad.

Para esto realiza actividades con el fin de apoyar a sus colaboradores, familiares de estos y prestadores de la empresa que estén pasando alguna situación vulnerable. Sumado a eso trabajan con familias de recicladores con el fin de contribuir al cuidado del medio ambiente y por otra parte aportar en la labor diaria de quienes se dedican a la recolección de residuos plásticos. Hoy se convierte en la primera empresa del rubro en certificar como una empresa con un propósito más allá de generar ingresos buscando un impacto social positivo, aportando así a una sociedad mejor.

“Estamos muy contentos de poder celebrar en esta oportunidad que somos una Empresa B, la primera del rubro con esta certificación. Eso garantiza que no solamente mide su impacto a nivel financiero y económico sino que también lo mide a nivel ambiental y social, entonces es una forma de reafirmar nuestro compromiso con la sociedad”, expresó Belén Cáceres, gerente general de la firma a La Nación/Nación Media.

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Interasistencia recibió el sello de certificación convirtiéndose en una Empresa B. Foto: Roberto Zarza.

De esta manera la firma celebra su nuevo sello de certificado convirtiéndose en una Empresa B por el modelo de negocio de impacto de desarrollo de la fuerza laboral porque contratan a personas con barreras al empleo como nivel socioeconómico, situación académica, brindan capacitaciones para que sus colaboradores puedan desarrollar sus respectivas tareas, así como en habilidades para desenvolverse personalmente e impulsa un programa de inserción laboral y formación que beneficia a jóvenes.

“Para mi es una gran satisfacción pertenecer al grupo de empresas con esta certificación, es algo que desde hace tiempo queríamos lograrlo y dentro de nuestro propósito está apoyar al desarrollo de las personas. Queremos seguir impulsando con más fuerza todo lo que venimos haciendo a nivel de empresa y que se extienda a nivel país”, mencionó Lupe Fernández, presidenta de la compañía.

La firma se convierte en la primera empresa del rubro en certificar como una empresa con un propósito. Foto: Roberto Zarza.

Sobre Interasistencia

Es una empresa de asistencia integral que brinda contención ofreciendo soluciones inmediatas con calidad y cordialidad, siempre abocados a superar las expectativas de sus clientes. Están comprometidos con el crecimiento y desarrollo de sus colaboradores y aliados estratégicos extendiendo así la cultura de innovación y la mejora continua en su entorno. Su misión empresarial es ser líderes en servicios de calidad, creando vínculos sostenibles desde Paraguay y al mundo. Su propósito es trabajar para facilitar la vida de sus clientes desde la cercanía, conteniendo y conectándolos con soluciones eficientes para sus necesidades. La asistencia a los mismos es su meta diaria.

Las Empresas B

Con más de 5.000 Empresas B certificadas en el mundo y 900 en América Latina, son el nuevo paradigma que se impone para crear una nueva economía en la cual el éxito sea medido por el bienestar de las personas y la naturaleza. Esta filosofía empresarial surge de la mano de B Lab, organización fundada en el 2006 en Estados Unidos que trata de crear condiciones necesarias para que las empresas prosperen teniendo un enfoque sostenible y socialmente responsable atendiendo los desafíos que enfrenta actualmente la humanidad.

El Sistema B es el articulador en América Latina que promueve el Movimiento B con el fin de desarrollar un ecosistema de triple impacto: económico, social y ambiental. Para esto es necesario que las empresas midan su impacto socio ambiental con el mismo rigor que lo hacen con sus indicadores financieros.

La organización tiene una visión sistémica en donde la certificación es solo la consecuencia de un propósito mayor que impulsa al sector empresarial a tomar decisiones corporativas considerando no sólo intereses financieros de sus accionistas sino también los de sus colaboradores, clientes, proveedores, la comunidad a la que pertenecen y el medioambiente.

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