El productor Juan Quevedo, propietario del flamante equino ganador de la competencia de resistencia en la Marcha Criolla 2022 en Loma Plata, Chaco, compartió con el diario La Nación-Nación Media lo que representó para él y toda su gente llegar a la final y lograr el gran galardón de campeón.

Al respecto, manifestó que el caballo criollo y la raza les llenan de sensaciones, lo cual les impulsa a participar de estas competencias, tanto las de doma, lazo y, por supuesto, la carrera de la Gran Marcha que ya se está volviendo una tradición y uno de los eventos más esperados en la zona del Chaco.

“Realmente es una emoción muy grande y una gratitud que nos da el caballo criollo siempre, no solo cuando ganamos, pero cuando es así, es mucho más fuerte y más grande. Nos sentimos muy llenos, satisfechos y contentos por lo que representa este premio que es sumamente importante”, expresó el hacendado Quevedo.

Pero la satisfacción de trabajar con los caballos les brinda igualmente la oportunidad de competir, divertirse, disfrutar de este tipo de encuentro con los amigos y, si se puede, por supuesto ganar, y con esto la ecuación se completa, pero lo más importante es compartir y divertirse con este deporte ecuestre que a muchos apasiona, remarcó el productor.

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Respecto a las actividades que se desarrollan con la raza criolla, manifestó que hoy por hoy, la Marcha Criolla es una de las más importantes y que desde que se inició dicha competencia quisieron llegar a la final, por lo que gracias a Dios, a “Genio de Sofía”, el ejemplar campeón que se portó de maravilla, dijo; a Pedro García, que es el jinete, y a todo el equipo que trabaja para ellos arduamente, es que pudieron llegar a este objetivo marcado.

Quevedo expresó que afortunadamente este año fue bastante bueno para ellos como Cabaña La Cautiva, puesto que tuvieron también varios otros premios en exposiciones de otoño para la especie bovina, tanto en hembra y macho como campeones y gran campeón reservado, y en la Expo Internacional de Mariano Roque Alonso con el premio de Gran Campeona y mejor ejemplar de raza.

A esto suman ahora el gran campeón de la Marcha Criolla, competencia para la que se prepararon con 3 caballos de hecho, de los cuales 2 llegaron a la final, resaltando el aguante de los animales, teniendo en cuenta que además de la carrera en el rústico suelo chaqueño, tuvieron que trasladarse 850 km desde la cabaña, situada en la ciudad de General Artigas, Itapúa, para llegar hasta Loma Plata.

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Pero la participación de la citada cabaña, su jinete y el ejemplar no fue lo único que resaltó de este gran equipo, pues don Juan tiene una jovencita heredera de la pasión por los trabajos de campo y los caballos, su hija Carlota, quien se adentra en tales quehaceres cuando el estudio le brinda un poco de tiempo, y ayudó bastante para el entrenamiento y desenvolvimiento de Genio.

“La pasión le corre en la sangre, pero también se va creando en ella al igual que en sus amistades, que se van complementando, se divierten y hacen un lindo equipo. Carlota es una apasionada del caballo, especialmente del criollo, y de todo lo que sea morfología y función. Se inició a los 3 o 4 años, y me parece algo muy sano, y ojalá que los padres siempre podamos tener la posibilidad de involucrar a nuestros hijos en esto”, subrayó.

En ese sentido, destacó la iniciativa de la Marchita Criolla, calificándola de fundamental para la incursión de los chicos tanto en las actividades como el trabajo de campo o el deporte ecuestre, tal y como él lo logró con Carlota, quien aprendió del trabajo del día a día en el campo con las enseñanzas de los trabajadores, su padre y Pedro, el jinete que los llevó al primer premio con Genio.

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