La seguidilla de aumentos no para y los distintos sectores siguen anunciando reajustes en sus precios. Los asiduos de los locales nocturnos también sufrirán este estrago, pues los bares incrementarán los precios de sus bebidas para no tener que cerrar, recurrir a la informalidad o despedir a sus empleados.

Es la realidad que comenta Augusto Isfrán, presidente de la Asociación de Bares del Paraguay (Asobar), sobre la complicada situación que se viene enfrentando durante todo este 2022, luego de dos años de pandemia y de la falta de políticas para reactivar la economía.

“Realmente nos vemos forzados a tener que reajustar nuestra carta, porque hace tiempo que venimos aguantando la suba de precios, porque todo lo que usamos subió. Hay que acordarse que la pandemia ya nos había dejado muy golpeados, y que para seguir tuvimos que endeudarnos”, expresó el referente del sector al equipo del programa “Tempranísimo” emitido por Universo 970 AM y Canal GEN- Nación Media.

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En ese sentido, mencionó que actualmente ya deben honrar sus compromisos de deuda, asumidos en el marco de la pandemia, por lo que se ven forzados a tener que remarcar sus precios en las bebidas y menús, porque de lo contrario dejarán de ser rentables.

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Costo nocturno elevado

Explicó que en la planilla de gastos de los bares, un 30% se destina a los recursos humanos, cuyo salario base supera los G. 3 millones, que ahora con el aumento del salario mínimo se elevará al menos un 10% más, además de lo que ya venían soportando con el incremento de todos los productos o insumos que utilizan en los establecimientos.

Es así que el reajuste tendrá que ser aplicado también en los productos, para no dejar de percibir los servicios del personal que realiza la atención al público consumidor, ya que ello implicaría descontratar a los trabajadores y sumar al desempleo.

Inducción a la informalidad

Insfrán también tuvo que poner como ejemplo que otra de las alternativas sería recurrir a la informalidad, pues el Estado mismo al parecer está “induciendo” a esto, a lo que explicó que los locales nocturnos tienen una carga impositiva muy grande, ya que los establecimientos que operan de noche pagan un 30% más sobre el salario mínimo, lo cual se traduce también a mayor aporte al IPS.

Por lo tanto, los costos de trabajar en horario nocturno son muy elevados, ya que también se debe abonar otros aportes como 10% a la Municipalidad, otro 10% a APA, 5% a SGP, sumando así un altísimo costo para poder trabajar formal y generar puestos de trabajo.

“La carga impositiva que tenemos es enorme, y esto va terminar de ser rentable, y eso conduce a lo que todo el mundo hace, recurrir a la informalidad con fiestas esporádicas sin compromiso impositivo y la gente va mirarle a eso como negocio, va cerrar sus bares porque hoy día estar a la vista del Estado es un problema ya para el propietario”, remarcó el titular de Asobar.

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