Desde la Cámara Paraguaya de Supermercados (Capasu) se muestran a favor del proyecto que pretende incluir a los alimentos en la deducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a la hora de cruzar las facturas con la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET), porque esto podría ayudar a la lucha contra el contrabando incentivando la compra formal.

Es lo que manifestó el presidente de la Capasu, Alberto Sborovsky, con relación a este aspecto que, de hecho, ya es un tema que se viene cuestionando desde siempre, especialmente por los profesionales independientes a quienes las compras de los supermercados no les sirve para deducir el IVA.

“Creemos que apoyar esta iniciativa de poder deducir esas facturas de alimentos y otros para el IVA de alguna manera puede motivar a los contribuyentes a que compren formal, es una medida interesante para incentivar eso de alguna manera”, expresó a la 1080 AM el titular de la Capasu.

Lea también: Funcionarios de Petropar cierran entrada a la institución ante posible despido de 260 personas

Básicamente se refiere al proyecto de ley que amplía las deducciones en el IVA, con lo cual se podrá descontar en la liquidación mensual el 100% de las compras del supermercado, situación que la administración tributaria bloquea con solo las deducciones que refieran a la actividad del contribuyente.

Es así que la idea es que se pueda aprovechar esto como un incentivo a diferencia de que los contribuyentes tengan que ir a realizar sus compras hasta Puerto Elsa o Nanawa y traer productos de origen dudoso porque si compra formalmente del supermercado, tampoco le sirve para su IVA, subrayó Sborovsky.

Por lo que consideran que desde el momento que se pueda deducir facturas de compras de supermercados, habrá un aliciente para realizar esa compra en cualquier negocio formal, remarcó el referente supermercadista.

Por otro lado, hay que mencionar que el Ministerio de Hacienda realizó una contrapropuesta alternativa al Congreso Nacional para que el Impuesto al Valor Agregado (IVA) se aplique con un tope del 20% a las deducciones de gastos en alimentos con la finalidad de reducir el impacto en las recaudaciones impositivas, que es lo que preocupa a la cartera económica, teniendo en cuenta la reducción que ya está vigente para el selectivo al consumo en el caso de los combustibles, por lo que todo conduce a una menor generación de ingresos fiscales frente al gasto púbico previsto para este año.

Puede interesarle: Confeccionistas buscan innovar en el mercado a través de la moda sostenible