Ciudad del Este. Agencia Regional.
Desde ayer comenzó a funcionar el cruce en balsa por el río Paraná entre Presidente Franco, Alto Paraná, y la ciudad argentina de Puerto Iguazú. Se había anunciado en principio que se habilitaría desde el 18 de abril pasado, pero no fue posible por la nueva bajada del río que impidió atracar en el puerto Tres Fronteras de Franco.
Ayer se realizaron seis viajes desde las 7:00 hasta las 16:00, horario en que funcionará el cruce por balsa hacia la ciudad argentina. Es lo que informó Jotvino Urunaga, de la empresa Intercom SACI, que opera la balsa en forma conjunta con la argentina Balsa Iguazú. Todavía fueron pocos pasajeros ayer y en los primeros viajes de hoy.
“El pedido de habilitar en forma temporal el puerto cerca del puente en construcción no prosperó y se tuvo que cargar piedra triturada para que puedan atracar las embarcaciones en el puerto Tres Fronteras y podamos habilitar los viajes finalmente”, dijo Urunaga. Son tres balsas las que realizan los cruces, de las cuales una es de la firma paraguaya y dos de la argentina.
“Recuperar este cruce con Argentina por el río Paraná era ya muy necesario, todos sabemos cómo se tarda para pasar por el Puente de la Amistad y esta es una vía alternativa que ayuda mucho para quienes quieren llegar a Puerto Iguazú”, dijo Jotvino Urunaga, propietario de Intercom.
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Antes de la pandemia se realizaban cinco viajes al día por balsas que cruzaban con su capacidad total en horarios de la mañana, sobre todo de gente que utilizaba mucho esta vía para aprovechar los precios más bajos en Puerto Iguazú de productos de la canasta familiar y artículos varios para la casa.
Ahora, el combustible es el más apreciado producto y por lo cual, aunque el viaje sea más largo por Foz de Iguazú a la Argentina, ya lleva regularmente a muchos paraguayos a Puerto Iguazú para la compra de combustible.
Parte del contrabando de mercaderías traídas de Puerto Iguazú también utiliza esta vía y por ello son muchas furgonetas que utilizan las balsas para llevar a pequeños comerciantes, quienes luego logran hacer pasar sus productos, aún con los “controles” aduaneros.