En una nueva entrega del especial de Emprendedores LN, espacio que busca acercar a los lectores historias y casos de personas que lograron encontrar su camino, ya sea en algo a lo que siempre quisieron dedicarse, o que tuvieron que romper esquemas e innovar en algún emprendimiento.

Por eso, hoy llegamos con la propuesta de un emprendedor que se dedica al rubro gastronómico, específicamente en el área de la pastelería, que empezó el negocio de forma casera, para hoy estar constituido como toda una empresa del rubro. Se trata del joven Jorge Cardozo Echauri, de 31 años, más conocido por su alias Georges, que se dedica a la pastelería profesionalmente desde los 24 años, hoy con su emprendimiento Georges Pâtissier.

Para adentrarse a su historia, relató que empezó a estudiar a los 19 años y para poder dedicarse a la pastelería de forma profesional, le llevó más de 5 años de formación, tanto a nivel local así como en el extranjero, en países como Argentina, Uruguay y Francia, trabajando y estudiando a la vez.

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“Primero inicié en la parte de panadería haciendo pizzas, panes varios, y luego tortas sobre pedido. Arranqué con un hornito que solamente entraba en el un molde de torta, y desde ahí siempre reinvirtiendo en el negocio para lograr producir de forma más eficiente y mejorar la calidad constantemente”, expresó Georges.

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Georges arrancó haciendo pizzas, panes varios, y luego tortas sobre pedido. Foto: Néstor Soto.

Asesora y forma

Actualmente se dedica también a brindar asesoría a locales, así como a la docencia gastronómica como formador, por lo que le debe mucho a esta profesión, dijo, al tiempo de rescatar: “No puedo quejarme, me hizo recorrer mucho y me trajo muchas experiencias”.

Así, Georges Pâtissier es un local ideal para todos los amantes del buen comer, de compartir sabores, de disfrutar una torta, un macaron, un rico chocolate, o para el que se anime a experimentar cosas nuevas, motivó el emprendedor.

El local cuenta con cafetería abierta al público de miércoles a domingos, a partir de las 11:00 hasta las 20:00, con propuestas saladas y dulces, con productos elaborados por ellos mismos desde cero, utilizando insumos de calidad y buenas prácticas, que aparte de hacerlo de manera creativa, buscan siempre el disfrute del comensal con porciones generosas, sabrosas y visualmente llamativas. Ya se te antojó probar algo, ¿no?

Además de la atención en el local, que se encuentra ubicado en Pitiantuta 1246 casi San Antonio, en el barrio Jara de Asunción, cuentan con servicio de catering para eventos, mesas dulces y postres al plato, a más de trabajar con hoteles y otras cafeterías que quieran contar con sus productos en el menú.

Sus exquisiteces

Y para ponerlos más curiosos respecto a lo que se puede llegar a deleitar en Georges Pâtissier, el emprendedor resaltó que en la cafetería hay una amplia variedad desde tortas chocolover, tres leches, con porciones a partir de G. 20 mil. Así también disponen de cookies rellenas en 4 sabores, a G. 12 mil, variedad de muffins entre G. 18 y 20 mil, los macarons de sabores varios que es la especialidad francesa que más venden.

Los infaltables croissants, rolls, pain au chocolat, todo de hojaldre francés que enamoran, y para acompañarlos jugos, cafés, bebidas frías y tragos que complementan la carta. Para los amantes de lo salado, cuentan con croissant rellenos, chipa 4 quesos, sandwhiches con pan de masa madre, todos producidos en el local.

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No pueden faltar los croissants, rolls, pain au chocolat, todo de hojaldre francés que enamoran como parte del menú. Foto: Néstor Soto.

Activar la imaginación

Como a todos nuestros emprendedores, consultamos a Georges si considera que es difícil emprender en Paraguay, a lo que respondió con un sí y con un no. Considera que realmente una buena idea puede prender fácilmente si es explotada en el nicho adecuado.

Pero como todo emprendimiento, el inicio siempre cuesta, al menos si uno lo hace a pulmón, a lo que se suman la falta de experiencia o los recursos limitados que hacen que uno tenga que activar la imaginación para poder sobrellevar los primeros pasos, y ya el resto es cuestión de gerenciamiento y reinversión.

“Eso sí, ser emprendedor no es un carrera de velocidad, sino de resistencia. Es ir conociendo el mercado, nuestro productos, a nosotros mismos y lo que nuestro producto o servicio puede dar a nuestros clientes. Es un proceso que lleva su tiempo y ni si tenés recursos ilimitados podés saltarte eso, muchos fallan inclusive teniendo esa parte cubierta”, aportó George.

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Pero lo más difícil es al iniciar, pues la falta de recursos y la experiencia, hacen cometer muchos errores. Por el medio mantener, formalizar la forma de trabajo, y cumplir con las miles de exigencias que le ponen a las pymes. Y luego consolidarse, manteniendo la calidad y seguir creciendo.

Al igual que a todos, la pandemia fue un proceso duro para ellos, pues tuvieron que cerrar el local que abrieron con mucha ilusión un año y meses antes de la llegada del virus COVID-19, en el que habían invertido mucho tiempo y recursos. No obstante, al cerrar y tener que pensar en otra cosa, descubrieron que había todo un mercado sin explorar con el tema del delivery, así que se dedicaron a eso exclusivamente por casi un año, para luego volver a abrir un local.

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En la pandemia tuvo que cerrar y descubrieron todo un mercado sin explorar con el tema del delivery, así que se dedicaron a eso exclusivamente por casi un año, para luego volver a abrir un local. Foto: Néstor Soto.

Afortunados gracias a los clientes

“Creo que nuestros clientes de antes y los nuevos siempre nos han apoyado y sido fieles, nunca me sentí inseguro en ese sentido, porque la gente conoce nuestros productos y saben que son de calidad. Me siento afortunado de poder decir que sobrevivimos y crecimos a través de la pandemia”, subrayó.

En cuanto a la rentabilidad del rubro gastronómico, opinó que es una trampa en la que muchos caen, porque en realidad no es sencillo, pues son muchos factores a tener en cuenta y que requiere de formación constante y formalización si uno quiere realmente llegar a hacerlo rentable.

En su caso, se atrevió a juzgar los resultados como excelentes, porque empezaron realmente de cero, el local no apareció en dos meses, es más, les llevó años y siguen construyendo y mejorando cada temporada. Al respecto, mencionó que la última mejora que se hizo fue este año, con el acondicionamiento el sector de panadería donde producen hojaldre para los croissants, rolls, y otros, y que toda la reinversión es fruto del esfuerzo y trabajo que dieron los buenos resultados.

No al “péichante”

Y para despedirse de este espacio, Georges también quiso motivar a todos los emprendedores, a luchar por sus sueños, instándolos a capacitarse si tienen la chance, y a trabajar para lograr la excelencia. “No hagan las cosas péichante (así nomás), háganlas para ser los mejores de sus rubros. Cuesta, lleva tiempo, sí, pero a la larga uno cosecha lo que siembra”, concluyó.

Para conocer más a Georges y lo que es su pastelería, se puede visitarlo en su cuenta de Instagram en georgepatissier, así como en el Facebook como @georgespatissier.


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