La crisis que provoca el aumentazo de precios de los combustibles está generando ya su efecto expectativa en el mercado interno, ya que los agentes económicos asumen como un riesgo potencial para el desenvolvimiento, que ya fue afectado por la sequía, por lo que pronostican un menor crecimiento para este 2022.
Así se observa en el resultado de la encuesta de Expectativas de Variables Económicas (EVE) a marzo del 2022, presentado esta mañana por el Banco Central del Paraguay (BCP). Los agentes económicos recortaron del 3% de crecimiento para el PIB al 2% para este año, mientras que mantienen la expectativas de expansión de 4% para el 2023.
En tanto, el mercado observa una mayor presión de la inflación, a raíz de aumentos consecutivos de los combustibles, que tiene efecto directo en la canasta de consumo familiar, por lo que prevé una variación de incrementos de precios, para este mes, así como para finales del 2022 y el 2023.
De acuerdo a la encuesta, realizada en el mes de marzo, los agentes esperan que la inflación cierre en 6,4% el año 2022, desde los 5,0% esperado el mes pasado, y en 4,5% el año 2023, desde los 4,0% anterior. Para los próximos 12 meses estiman una inflación de 4,8% y para el horizonte de política monetaria (entre 18 y 24 meses), estiman una inflación del 4,4%.
Para el mes en curso, la mediana de las expectativas de inflación mensual es de 1,0%, superior tanto a la registrada en el mismo mes del año pasado (0,3%) como a la del mes anterior (0,8%). Para el mes de abril de 2022 los agentes esperan una inflación mensual de 0,6%.
Inflación anual de 2 dígitos
Por otro lado, el promedio de la expectativa de inflación mensual para marzo de 2022 es de 0,9%, porcentaje superior al promedio de la expectativa registrada durante el mismo periodo en el 2021 (0,5%). Así, la inflación anualizada del año 2022, utilizando el promedio mensual de la expectativa de inflación, sería de 11,1%.
Sobre el punto, Miguel Mora, economista jefe del BCP, en conferencia de prensa, argumentó que este recorte de expectativas para el crecimiento tiene que ver como efecto de factores internos, como es la sequía que implicaría un ajuste a la baja para la expansión económica 2022.
“No obstante, dada la producción de la soja, que trata de una disminución en niveles de 40% y 60%, que se tendrá en las próximas semanas, desde el Banco Central del Paraguay vamos a tener un mejor panorama del sector agrícola y de otros sectores para poder revisar nuestras proyecciones, que se estará dando el próximo 29 de abril”, indicó.
Por de pronto, los agentes económicos recogieron ya este choque climático y lógicamente se tradujo en una reducción en las expectativas de crecimiento en torno al 2%.