Los números experimentados por el sector agroindustrial durante el 2021 son para el olvido. Las industrias aceiteras registraron por tercer año consecutivo una caída en el volumen de procesamiento, según lo dio a conocer la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) en un reciente informe divulgado.
De acuerdo con el reporte, en los 365 días del año pasado se logró molinar unas 2.830.992 toneladas de oleaginosas (soja y otros granos), el volumen más bajo desde el 2013, año en que se había procesado unas 2,76 millones de toneladas.
En ese sentido, el gremio explica que este dato implica también una reducción del 19% en comparación al promedio molido en los últimos tres años y unas 500.000 toneladas menos con respecto a la cifra total del 2020.
Lea también: MOPC autorizó suba de precios de peajes de Pozo Colorado y Coronel Bogado
“Siguiendo la tendencia que se registró a lo largo del año, el procesamiento total de diciembre (2021) fue inferior al del mismo mes del 2020, como sucedió en 10 de los 12 meses del 2021″, agregó la Cappró.
Participación de la soja
De todos los granos procesados por las industrias molineras del Paraguay, la soja tuvo una participación del 98,7%. De las 2.830.992 toneladas molidas por el sector en el 2021, un total 2.796.026 toneladas fue soja, mientras que solo 34.966 toneladas fueron otros granos.
En comparación al volumen promedio de soja industrializada en los últimos tres años ((3.446.467 toneladas), la cantidad lograda en el 2021 (2.796.026 toneladas) representa una caída del 18,9%, que equivale a menos 650.441 toneladas de soja procesada en las industrias del país.
Sobre el punto, desde la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales detallan que la molienda de soja es la que marca la tendencia indicada, ya que en el acumulado de los demás granos (apenas 1,2% del total) se consiguió una leve mejoría con relación al 2020, aunque no se logró alcanzar el promedio de los últimos tres años.
“Estos datos terminan por validar las expectativas negativas de las que se venían hablando para este año, dado los constantes cambios en las reglas que afectan la competitividad de esta industria, que debe competir en desventaja con las fábricas de otros países para conseguir la materia prima necesaria”, puntualizaron desde el gremio.