Las fiestas de fin de año se acercan y siempre generan una alta demanda de consumo cárnico con el fin de compartir una cena en familia. Más allá de las fluctuaciones de precios experimentadas durante el año dentro del sector, la Cámara Paraguaya de Supermercados (Capasu) se encuentra expectante ante el importante incremento en ventas que suelen efectuarse en estas fechas.
Desde el directorio de la Capasu se muestran optimistas con que los precios puedan mantenerse equilibrados y no se disparen, para que de esta manera puedan ofrecer a los clientes buenas ofertas en distintos cortes. En el rubro de carne porcina, las expectativas son más concretas en cuanto a precios, ya que aseguran que se mantendrán sin mayores variables.
“Los supermercados buscan realizar negociaciones por volúmenes de compra y de esta manera obtener descuentos para transferirlos al cliente dentro de la medida de las posibilidades. Los frigoríficos a su vez también seguirán la misma línea y así poder ser atractivos en cuanto a precios”, comentó a canal PRO, Gustavo Lezcano, directivo de la Capasu.
Explicó que con referencia a otros años, existe una bajante del 20% por kilogramo de carne. Esto se da a consecuencia del incremento de precios experimentados dentro del sector, que generó que el consumo por parte de los clientes sea mucho más medido. Respecto a los cortes de carne y su demanda con relación a las fiestas, dijo que ya empezaron a experimentar mayores ventas en ciertos tipos de productos del rubro.
“En esta temporada de diciembre, cortes como el peceto, la lengua y la pierna de cerdo reciben una alta demanda por parte de la clientela. También cortes de primera, siempre y cuando estén dentro de un rango de precio accesible son solicitados para la realización de distintos platos”, expresó el directivo.
Análisis por semestre
Respecto a las ventas que realizaron hasta la fecha, Gustavo Lezcano hizo un análisis comparativo en cuanto a semestres. En la primera parte del 2021, el escenario ofreció una estabilidad equilibrada, donde no se experimentaron diferencias importantes. Sin embargo, a partir del segundo semestre del año, el panorama fue cambiando en los meses de agosto y setiembre, específicamente.
“Al dispararse el precio de la carne hasta llegar a 50.000 guaraníes el kilo en algunos cortes, hizo que el consumo sea mucho más racional por parte del consumidor. Esto repercutió en un decrecimiento de consumo de 10% a 12% por kilogramo en comparación con el año pasado”, recalcó el representante de la Capasu.
Para finalizar, expresó que el desafío para cerrar el año es alcanzar márgenes del periodo anterior. El objetivo trazado es equiparar números del 2020, aunque concluyó que se ve como algo difícil. Esperan que para el 2022 la dinámica vaya fluyendo y el panorama vaya equilibrándose entre precios, consumo y demanda.
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