Ciudad del Este. Agencia Regional.
Itaipú organizó esta tarde un recorrido por el sitio de obras del futuro puente de Integración para anunciar que se llegó a la etapa de instalación de la primera dovela en el lado paraguayo de la construcción. Dovelas son las estructuras metálicas que se van encastrando unas a otras en el vano central del puente que tiene 470 metros y que no está sujeta a tierra firme. Encima de las dovelas se colocarán los concretos que formarán el pavimento del puente. Hoy se ven dos estructuras enormes a ambas costas del río Paraná y la unión entre ambas se hará mediante estos materiales metálicos.
Son 37 dovelas en total que serán colocadas y con las cuales la estructura tendrá finalmente una unión física entre ambos países. En el lado brasileño ya se instalaron dos y en la margen paraguaya se instalará mañana la primera. Es lo que explicaron los ingenieros Pánfilo Benítez y Fernando Barúa de Itaipú, margen paraguaya, y el ingeniero Elvio Bernardi, del consorcio brasileño responsable de la obra, quienes dirigieron el recorrido.
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Cada dovela lleva un promedio de 15 días de tiempo de colocación, dijo Barúa, mientras que Bernardi señaló que la instalación culminaría en julio del 2022, poco antes de la culminación total del puente.
El puente de Integración unirá a las ciudades de Presidente Franco, de Paraguay, y a Foz de Yguazú, Brasil, previéndose la culminación de la construcción en setiembre del 2022, según ratificó hoy el ingeniero brasileño Elvio Bernardi. Construbase-Cidade-Paulitec es el consorcio brasileño responsable de la obra que es financiada por Itaipú, margen izquierda o margen brasileña.
El puente de Integración tendrá 760 metros de largo y 19.90 metros de ancho, dos carriles de circulación, banquina de 3 metros a los costados y veredas peatonales de 1.70 metros a cada lado. Para el ingeniero Fernando Barúa, de la Superintendencia de Obras de Itaipú, la dimensión de los carriles de circulación es generosa teniendo en cuenta las banquinas a ambos lados. Cada metro del puente tendrá capacidad de soportar 45 toneladas.
La obra había comenzado con seis meses de retraso en Presidente Franco, con relación al inicio en Foz de Yguazú y esa diferencia fue acortándose con el tiempo y es lo que explica que hoy, en Brasil ya se instalaron dos dovelas y en Paraguay recién se instalará la primera. Elvio Bernardi dijo que la diferencia en el cronograma de obras está en torno a los 45 o 30 días aproximadamente.
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500 trabajadores
La obra ya tuvo su pico de mayor cantidad de trabajadores llegando a unos 500 aproximadamente, y en este momento son 250 operarios porque en la actual etapa de la construcción no se requiere de mucha mano de obra, según el ingeniero Elvio Bernardi. Afirmó que no pararon durante la pandemia, pero que sí tuvieron dificultades en la provisión de insumos porque el mercado estaba con inconvenientes por la situación sanitaria. En la mano obra afectó también un poco, pero principalmente fue en los materiales y equipamientos”, expresó Bernardi.
La mano de obra paraguaya utilizada no fue directamente en la obra propiamente en forma directa, pero sí de manera indirecta para el servicio de alimentación, seguridad y las utilizadas en la provisión de insumos. “Una gran parte de los insumos para mezcla de concreto fueron proveídos por empresas paraguayas, con lo cual también sumaron manos de obras indirectas”, explicó el ingeniero brasileño.
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