Los expertos en economía, Carlos Fernández Valdovinos y Santiago Peña, señalaron que el Producto Interno Bruto (PIB) alcanzaría el 4,5% de crecimiento para finales del 2021, pero advirtieron que es preocupante el estancamiento que está atravesando la economía en materia de crecimiento, así como la inflación y las pocas señales de retorno hacia un déficit fiscal del 1,5%, como establece la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF).

Dichas referencias sobre la situación económica por la que atraviesa el país fueron señaladas ante un gran número de personas que acudieron al Basanomics especial, desarrollado anoche en las instalaciones del Sheraton Hotel Asunción y que tuvo como componente social que todo lo recaudado en materia de entradas será destinado a los programas educativos de la Fundación Amcham Paraguay, que busca apoyar y estimular la educación de niños, jóvenes y adultos del país.

El evento Basanomics contó con una gran participación de personas. Foto: Eduardo Velázquez.

“La economía rebotó, como era de esperarse aquí y en toda la región, pero no muestra signos de un crecimiento sostenido y eso preocupa. Nos gustaría que los motores de la economía comiencen a moverse, pero hasta ahora no sucede. Existen factores externos e internos que condicionan la recuperación”, manifestó Peña.

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Agregó en ese sentido que se deben tomar medidas microeconómicas. “Se necesita componer el mix de políticas económicas. La inflación de los precios de alimentos se está incrementando y va a tener sus efectos en la encuesta social. Vamos a terminar con más personas con niveles de pobreza y pobreza extrema”, dijo el economista y exministro de Hacienda.

Entre sus conclusiones finales, Santiago Peña señaló que la inflación terminará en 6% este año, mientras que se espera que el déficit fiscal se ubique en torno a 3% y 3,5%, y el dólar en G. 7.000 la unidad.

“Aprendamos de los errores, abundan en la región. Tenemos que transitar estos momentos que son difíciles, pero les aseguro que si hacemos la tarea, nosotros podemos tener un desarrollo económico y una recuperación económica que nos va a permitir que se genere el efecto derrame. Hicimos un cálculo razonable de cierre del déficit fiscal en 2,8% para este año y 1,6% para el 2022, pero estamos lejos de esos números”, mencionó el especialista.

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En el mismo contexto, precisó que uno de los principales problemas que tiene el Gobierno actual es la rigidez del gasto público. “Hay que señalar que en esta pandemia el 100% de los ingresos tributarios son destinados a salarios e intereses de la deuda, y esa es la razón del porqué no hay plata. Esto ha disminuido, pero todavía está muy lejos del nivel que creemos que debería estar”, expresó

Añadió que acá debe haber un esfuerzo de ambos lados, el aumento de la recaudación y una disminución de los gastos salariales. “El otro problema que también presiona es la situación de la Caja Fiscal, que está con un déficit que crece año a año y esto requiere una profunda reforma para que se pueda igualar los beneficios de todos en alguna forma”, dijo.

Calidad del empleo

Por su parte, Carlos Fernández Valdovinos remarcó que preocupa que la economía nacional esté estancada en materia de crecimiento. “Ya llegamos al nivel de la prepandemia y el Banco Central estima que vamos a crecer, nosotros también. Claro, si uno mira el promedio del índice, básicamente habrá un crecimiento económico, pero empieza a preocupar lo que está pasando desde que alcanzamos el pico”, manifestó.

Aseveró que desde febrero de este año el crecimiento estuvo estable. “Subimos y bajamos, si se perpetúa en el tiempo va a ser un crecimiento cero; eso nos empieza a preocupar. No es una luz roja, pero es anaranjada. El año que viene, dependiendo del tiempo, podemos tener sorpresas, porque este no fue bueno, así que veremos cuáles serán los motores del 20121″, advirtió.

Carlos Fernández Valdovinos afirmó que la calidad del empleo ha disminuido. Foto: Eduardo Velázquez.

Refirió que la cantidad no es calidad, con relación a la empleabilidad actual. “Se reabrió la economía, se recuperaron empleos, hubo mucha gente que estuvo muy mal el año pasado, pero la calidad del empleo actual es discutible. Hubo una disparada en el número de personas que tenían problemas de empleos, mejoró con la apertura y sigue en niveles elevados. El que más sufrió fue el sector terciario y es el que se está recuperando más rápidamente. La recuperación del empleo básicamente se está dando en el sector informal, las condiciones van a estar peor que antes por la precariedad y falta de seguridad social”, alertó el especialista y expresidente del Banco Central del Paraguay (BCP).

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