Los trabajos de construcción del Puente de Integración, en proceso de edificación sobre el río Paraná entre Paraguay y Brasil, alcanzaron la última semana un 70% de avance físico, informaron desde la Itaipú Binacional.
Los técnicos de la Dirección de Coordinación de Itaipú explicaron que las tareas presentan una importante evolución, lo que demuestra una sostenida ejecución del proyecto financiado por la binacional con US$ 84 millones.
Hacia el lado paraguayo, un total de cuatro cabos son los primeros en ser instalados y serán para el atirantamiento por debajo de la torre principal de la futura conexión vial.
La ejecución de las obras contempla tareas de elevamiento de esta pila, que debe alcanzar los 163 metros de altura este mes. Igualmente, arrancó el montaje de dovelas metálicas en el cantero de obras.
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Por otro lado, en el lado brasileño fue posicionada la primera dovela en el tramo central del puente, de un total de 37 que deberán ser colocadas. Las mismas son instaladas utilizando un moderno sistema denominado “dispositivo de lanzamiento”, proyectado y construido exclusivamente para el fin.
Desde la Itaipú explicaron que el Puente de Integración es del tipo atirantado. El tramo central estará compuesto por tableros soportados en varios puntos de su extensión por cabos fijados a la caja de equilibrio. El mástil y los tableros son los que reciben y transmiten las cargas.
El puente tendrá 760 metros de largo, con columnas principales de 174 metros de altura y con un vano central (espacio que queda entre los dos pilares por donde pasa el cauce de navegación del río) de 470 metros de ancho y más de 60 metros de alto.