La ovinocultura es una rama de la ganadería que vino desarrollándose auspiciosamente en los últimos años en el país con la importación de material genético que convierte a la producción ovina en una alternativa más que atractiva por el interés que genera en el mercado local y regional.

En la 75ª Exposición Nacional de Ganadería, el sector registra una amplia participación, con al menos 450 ovinos inscritos de cuatro diferentes razas, lo que evidencia el gran interés depositado en la producción ovina. Y debido a ese auge en este segmento, más la cantidad de animales inscritos en la muestra, es que desde la Asociación Paraguaya de Criadores de Ovinos (APCO) prevén generar un volumen de negocios por unos G. 500 millones en los dos remates a realizarse en el marco de la Expo Ganadera 2021.

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“Por la cantidad de animales que se inscribieron y el desarrollo del rubro a nivel país, tenemos una muy buena expectativa y pensamos que en los dos remates tendríamos que llegar a los G. 500 millones, entre unos 70 lotes, y hablamos de 80 animales por remate”, expresó Nicolás Peña, presidente de la APCO.

Actualmente, un carnero puede valer G. 4 a 7 millones, recordando que en la última edición una oveja de la raza Santa Inés llegó a un precio de G. 12 millones, así como en otras ferias anteriores donde se llegó a cotizar a G. 50 millones. “Estamos muy conformes con esta expo ganadera, que se volvió muy compacta, y ambos segmentos, tanto lana y a pelo, están muy valorados por sus asociaciones. Con bancos dando productos, mercados abriéndose, exportaciones e importaciones constantes”, agregó Peña.

No obstante, el rango de crecimiento de la ovinocultura en Paraguay todavía no llega al tope, al ser un nicho de mercado muy sostenible y en pujante desarrollo, pero siendo un poco autocríticos, dijo que se debería exigir más en los procesos de rapidez de volumen. “El componente que está faltando también es la industrialización del rubro, quizás con algún frigorífico, ese es el cambio que el sector necesita realizar y cuando más rápido se dé, será mejor”, precisó.

La agenda del rubro ovino ya comenzó el miércoles 15 de setiembre con la llegada de los animales para pasar por la admisión desde el jueves, que culminó el sábado con el repechaje, para así avanzar este domingo con el juzgamiento a campo que estuvieron realizando, y mañana empezará el juzgamiento de animales a bozal, junto con otros rubros.

Peña explicó que por el volumen de animales inscritos, se adelantaron un poco y lo que hicieron fue segmentar entre las especies con lana que son la H. Down y Texel, que hoy iniciaron su juzgamiento, y las de pelo como las razas Santa Inés y Dorper.

Es así que luego de los juzgamientos, ya el próximo miércoles se realizará el primer remate, para lo cual se cuenta también con líneas de financiamiento de una entidad al 7% de interés y 18 meses de plazo, con lo que se refleja también las facilidades cotejadas actualmente.

Desde la APCO informaron que el juzgamiento a campo de ovinos a lana culminó con dos campeones de la raza Dorper, como primer y segundo premio a los lotes 31 y 30, respectivamente, ambos de la Ganadera Itá Poty SA.

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En la raza Hampshire Down, el lote número 13 de la Cabaña San Roque se quedó con el primer premio, el segundo premio fue para el lote 10 de Norman Cristaldo, y el tercer premio para lote 9 de Miguel Reinau.

En la raza Texel se tuvo al animal perteneciente a Jacinto Riera con el premio número uno al lote 1, para el segundo premio al lote 3 de Ignacio Callizo y Giovani Ochipinti lote 8 se quedó con el tercer premio. En tanto que en la raza Santa Inés quedaron el lote 19 como primer premio para la cabaña San Bernardo, el lote 14 con el segundo premio para Nicolás Peña y como tercer premio al lote 15 de la cabaña Doña Patrona.