El presidente de la Cámara Paraguaya de la Industria Farmacéutica (Cifarma), Gerardo García, manifestó que el sector se pudo desarrollar gracias a la innovación y predisposición que pusieron las empresas del rubro para ayudar a subsanar los efectos de la pandemia.

“Nuestra industria en la pandemia pasó a ser una industria estratégica, al igual que varias otras, y por medio de innovaciones pudimos poner a disposición de la población en general y del Ministerio de Salud los productos que hacían falta en su momento”, expresó.

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Recordó que en el mes de diciembre justamente tuvieron que enfrentar los faltantes de medicamentos muy utilizados para el tratamiento de pacientes con COVID-19, como el Midazolam y el Atracurio, cuando solo tenían registrado para proveer el primero de ellos. No obstante, para febrero se pudo desarrollar en tiempo récord el segundo mencionado.

La industria farmacéutica tuvo que enfrentar los faltantes de medicamentos muy utilizados para el tratamiento de pacientes con COVID-19, como el Midazolam y el Atracurio. Foto: MSP.

Predisposición con el sector público

Así mismo, cuando inició la pandemia, del primer producto que se habló y del cual se dijo que sería clave en pacientes infectados fue la hidroxiclorofina, medicamento que sí estaba registrado pero para otros usos, por lo que pusieron a disposición de las autoridades todo el stock.

Esto, de modo a mostrar la predisposición para trabajar de forma conjunta, pero que lastimosamente no hubo una buena comunicación y, por ello, no pudieron ayudar como querían.

Al tiempo de recalcar que Paraguay es el único país en la región que está produciendo Remdesivir, y que la industria se puso los pantalones largos para poder innovar y desarrollar, agregó.

Con relación al abastecimiento de las vacunas, García señaló que el Gobierno se equivocó en primera instancia con la estrategia, tanto de proveedores locales como internacionales

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En ese sentido, subrayó que tras varios intentos fallidos de establecer un acuerdo con el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) para el fraccionamiento de vacunas a nivel local, recientemente se dio la posibilidad de establecer una alianza con una empresa americana-taiwanesa.

Al respecto, anticipó que una vez aprobada Paraguay podría iniciar el próximo año el fraccionamiento de la vacuna anti-COVID de dicha procedencia, y que se prevé la compra de un millón de dosis de la misma.

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