El economista y exviceministro de Industria José Luis Rodríguez Tornaco reprendió el reciente informe de los tres años de gestión del presidente de la República, Mario Abdo, cuyo gobierno se caracteriza desde sus comienzos por un problema de gestión.
Mencionó que si se analizan los números que publica el Ministerio de Hacienda, evidencia que en el peor momento de la pandemia, con 13.000 compatriotas fallecidos y sus familias enlutadas, el Ministerio de Salud solo ejecutó el 21% de su presupuesto para la primera mitad del 2021, según lo indican los datos abiertos de la cartera económica.
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“Desde un primer momento Abdo tuvo un problema de gestión, y esta baja ejecución, teniendo en cuenta que estamos en emergencia sanitaria, carencia en los hospitales y la autoridad sanitaria, solo lleva ejecutado el 21% de su presupuesto, eso significa que hay componentes de gestión que se tienen que revisar”, expresó.
Ley “revólver cargado”
Rodríguez Tornaco recordó las palabras del presidente, que emplea el discurso de que el principal legado de su gobierno será haber duplicado la infraestructura en terapia intensiva en el país.
Si bien esto es auditable y medible, ya que se sabe que de 400 camas se duplicó a 800, se incorporaron 12.000 nuevos contratos de blanco, cuyos logros sí quedarán en el sistema, lo que se debe tener en cuenta también es que nunca un gobierno recibió tanta plata para salud.
Catalogó a la ley de emergencia sanitaria como una ley de “revólver cargado”, para poder obviar muchos procesos licitatorios, y reprendió que aun así la ejecución no llegará ni a la cuarta parte de los recursos.
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Asimismo, señaló que cuando el gobierno asumió, en el 2018 recibió con US$ 8.000 millones la deuda externa, y a hoy, ese número aumentó a casi 11 puntos del producto de deuda externa, a US$ 13.000 millones que se deben pagar, lo cual se pudo ampliar el paquete fiscal gracias a que había una espalda de estabilidad macroeconómica previa, pero esa comodidad hoy ya no hay, subrayó.
“Es así que preocupa que el presidente mire los números y simplemente suspire y diga “fantástico, estamos todos bien”, cuando en la realidad si se aterriza eso a la gente, no le llega, lo cual es un punto importante para poder rectificar rumbos, y sobre ese eje se debería enfocar la gestión”, acotó.