El Viceministerio de Transporte abrió sumarios administrativos a tres empresas explotadoras del servicio de transporte público de pasajeros tras denuncias de reguladas en las frecuencias asumidas por las firmas en cuestión. Reportes ciudadanos sobre esperas de hasta dos horas para subir a un ómnibus no cesan.
Víctor Matto, jefe de Gabinete del Viceministerio de Transporte, informó este jueves que cuentan con investigaciones abiertas para determinar si efectivamente estas empresas están incumpliendo sus compromisos asumidos con el Estado paraguayo como prestadoras de servicios públicos.
“Se están abriendo algunos sumarios administrativos a fin de corroborar algunas denuncias recibidas y reportes, además de informes técnicos, en cuanto a la frecuencia del servicio de algunas empresas de transporte”, expresó el funcionario durante una entrevista con la radioemisora 800 AM.
Explicó que en los últimos días abrieron sumario a la empresa Panchito López, que explota la línea 29, a fin de indagar sobre el nivel de frecuencia que tienen sus unidades. “También tenemos otros sumarios por el mismo hecho para otras empresas”, acotó.
Matto comentó que el procedimiento se inicia con la recepción de la denuncia para luego solicitar un informe técnico al respecto. Estos elementos base sirven para iniciar formalmente una investigación a fin de llegar a una definición. Esto impulsa a la cartera estatal a tomar las medidas necesarias y poder ofrecer un mejor servicio a la población, según afirmó.
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Otras dos empresas que también cuentan con sumarios abiertos son las empresas Villa Hayes y Lago Azul de Ypacaraí, además de otras que estarían en proceso de ir por la misma senda. El jefe de gabinete manifestó que son tres salidas procesales las que tienen un sumario administrativo; la sanción, absolución o cancelación del contrato, según la gravedad y veracidad de los hechos investigados.
Las reguladas en las frecuencias de las unidades del transporte público en el Área Metropolitana siguen siendo el pan de cada día de millones de usuarios que utilizan el servicio para llegar a sus respectivos destinos. Esta situación que comenzó a generarse a inicios de año genera malestar en la población que debe aguardar horas para abordar un bus.