Ciudad del Este. Agencia Regional.

La bajante del río Paraná no solamente afecta a los puertos del sur del país, sino también a las embarcaciones que van desde el Este. Si bien llegan las cargas hasta el Puerto Trociuk, lugar donde están varadas las barcazas en espera de una ventana de agua debajo de Yacyretá para proseguir la navegación, todos los puestos sobre el río Paraná están afectados. Es lo que explicó Mauro Alvarez, directivo del Puerto OTS, del barrio Tres Frontera de Presidente Franco, Alto Paraná y de la Naviera Atria.

“Desde el Puerto Tres Fronteras llegamos a la zona cercana a Yacyretá, pero con problemas. Cuando normalmente se navega con seis barcazas, hoy se navega con una o dos barcazas. Eso representa mucha lentitud y altísimos costos en la logística; al final el costo del viaje es el mismo, pero se hace dividida por muchos menos carga, lo cual hace que el gasto por toneladas sea enorme. Es un perjuicio grande y afecta a toda la cadena logística”, explicó Mauro Alvarez a La Nación.

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El gasto por tonelada de carga se incrementa debido a que las barcazas deben realizar más viajes con menor capacidad. Foto: Gentileza.

“Estamos totalmente cerrados a la navegación, tenemos muchos convoys parados arriba de la represa de Yacyretá. Nosotros tenemos 70 barcazas, unas cien mil toneladas, hay otras navieras con unas 25 mil toneladas”, indicó el representante de Atria Soluciones Logísticas. Son 11 puertos privados que hay en la zona y todos están muy afectados, manifestó el ejecutivo.

Mencionó que la logística del grupo empresarial al que pertenece es la que tiene más operaciones en Alto Paraná y que históricamente, cargan no solo en los puertos que tienen sino también “en puertos de la gente de Colonias Unidas, Bunge, Cargill, en diferentes puertos”. Aclara que también transportan combustible que igualmente está parada por la situación.

Ventana de agua sería para inicios de junio

“Estamos expectantes. Lo que conocemos es que esa ventana sería a finales de mayo o la primera quincena del mes de junio. Hoy es otra reunión técnica bilateral donde se tratará el tema, veremos si se allanan a nuestro pedido”, explicó, a su vez, Wilson Sedy, directivo de Caterpa (Cámara de Terminales Portuarias) y Capeco (La Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas), por la Cooperativa Colonias Unidas y Trasn Agro S.A con Puerto Don Joaquín.

“En los puertos estamos prácticamente con la capacidad ocupada al 100%, son 600 mil toneladas que tenemos hoy en los puertos. En la retaguardia, es decir, en silos de acopio, cooperativas de productores, de empresas que se dedican al almacenaje de granos, hay más o menos un millón de toneladas también”, según lo afirmado por Sedy. Esto sumado a las 125 mil toneladas que ya están en los convoys.

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El dragado del río Paraná es el problema de fondo para la navegabilidad. Foto: Gentileza.

“Estamos trabajando desde marzo haciendo la solicitud por la ventana de agua. Hay seis convoys cargados, ya habíamos previsto la carga, no la totalidad a las bodegas de las barcazas, sino que a un calado muy inferior de lo que normalmente se carga, previéndose esta bajante, solo que el descenso se dio en forma estrepitada y bastante abrupta y no permitió que los convoys naveguen hacia destino”, explicó Wilson Sedy a La Nación.

Remarca en que los problemas residen principalmente debajo de Yacyretá, donde existen unos pasos complicados denominados Loro Cuarto y Cementerio, porque son pasos de roca.

“El año pasado ya tuvimos este mismo inconveniente, pero no tan drásticos, llegamos a hacer incluso dos o tres ventanas de agua con cinco convoys pasando en simultáneo. Es la misma operativa que estamos solicitando vía Cancillería”, recuerda el directivo, quien es miembro de la Comisión de Logítica de Caterpa.

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