La situación en la ciudad fronteriza de Salto del Guairá no es nada buena, pues está prácticamente muerta si se la va a comparar con años anteriores y, actualmente, los pobladores y la actividad comercial la están “remando”.

Es lo que señaló el presidente de la Cámara de Comercio de Salto del Guairá, Víctor Stanley, quien, en contacto con la 1020 AM, habló sobre el estado de abandono en el que se encuentra la ciudad.

“Está muerta la ciudad si es que vamos a comparar con los años anteriores, estamos remando y los brasileños que ingresan, sin poder adquisitivo, lo hacen más bien para pasearse, entran a tomar agua mineral”, expresó Stanley.

Manifestó que la gente está desesperada, pero que tampoco es tonta, por lo que creen que volverán a manifestarse para que el Gobierno les haga caso, ya que el desempleo sigue latente y hay cuentas que pagar.

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Stanley lamentó que muchas personas que fueron hasta Salto del Guairá a abrir negocios tuvieron que marcharse por la complicada situación, y que no tienen una respuesta del Gobierno.

“Nosotros estamos remando en una catarata con esto, estamos cansados, pero no derrotados, y vamos a movernos nuevamente para que nos escuchen porque lo único que se concreta en las mesas técnicas es el veremos, pero nunca una solución”, agregó.

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En ese sentido, como alternativa viable para paliar la situación consideran que el Gobierno debe aplazar el pago de las cuentas y congelarlas porque eso es lo que desespera a los trabajadores.

Indicó que el 40% de los bienes de la mayoría ya está judicializado, y que la gente no tiene para pagar, a lo que se le suma un agravante, el escape de la usura que está creciendo cada vez más, con algunas personas que ahora son acaudaladas, mientras que otras quedaron en la calle.