El compromiso interno que debe honrar el Ministerio de Hacienda este año en concepto de deuda pública generada mediante la colocación de bonos del Tesoro es de G. 1,1 billones (equivalentes a US$ 174,7 millones al cambio actual), según la cartera económica.

De ese total, G. 295.713 millones (US$ 46,2 millones) deben ser desembolsados para el pago de intereses. Mientras que G. 822.769 millones (US$ 128,5 millones) serán abonados por el fisco en concepto de amortizaciones, es decir, devolución del capital captado en años anteriores mediante la colocación de bonos a través de la Bolsa de Valores y Productos de Asunción SA (BVPASA).

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El Ministerio de Hacienda lleva colocado este año G. 747.744 millones (US$ 116,8 millones) en bonos del Tesoro mediante cuatro emisiones, una por cada mes. La última incursión realizada por la cartera fiscal en el mercado de valores local fue el pasado 13 de abril, fecha en que logró ubicar títulos de deuda por un valor de G. 144.000 millones.

En dicha ocasión se procedió a la reapertura de bonos de 7 y 10 años de plazo. La adjudicación de estos papeles se concretó con una tasa de 4,65% y 6,69%, respectivamente.

Desde el 2018 el fisco viene extendiendo los plazos de los bonos del Tesoro, testeando primeramente el apetito de los inversionistas con una subasta de un bono a 10 años de plazo. En el 2020 lo hizo con emisión de 15 y 20 años de plazo. Los resultados fueron muy auspiciosos para Hacienda, que recibió un valor de oferta mayor al monto subastado.

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