Unos 60 técnicos de extensión agraria de la Dirección de Extensión Agraria del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) serán capacitados en agricultura sostenible, y estos a la vez volverán a transmitir las nuevas prácticas y capacidades técnicas aprendidas a líderes agrícolas a nivel país.
Se trata del Programa de Capacitación de Capacitadores que se enmarca en el Proyecto Saemaeul Undong (SMU) de Agricultura Sostenible y Desarrollo Rural en Paraguay, que significa Movimiento del Pueblo Nuevo Tavagua Pyahu Ñemongu’e.
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El mismo es impulsado por la cooperación técnica de la Agencia Internacional de Cooperación de Corea (Koica) y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), implementado por el MAG en alianza con la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Asunción (FCA/UNA).
El objetivo de los talleres es fortalecer las capacidades técnicas y el talento humano en agricultura sostenible, a más de impulsar el desarrollo rural.
Pilares
El modelo de desarrollo sostenible Saemaeul Undong se basa en tres pilares: la autoayuda, que busca incentivar la capacidad propia de los individuos de generar cambios. La diligencia, de modo de operar con agilidad, eficiencia y esfuerzo. Y cooperación, logrando maximizar los logros de cada acción con el efecto multiplicador de las sinergias del trabajo cooperativo.
Protagonistas
Los impulsores del programa destacan que los diferentes actores que serán beneficiados con las capacitaciones no solo introducirán nuevas aptitudes a través de las clases prácticas, sino que también se convertirán en “protagonistas” eficientes en la generación de los cambios que el desarrollo de sus comunidades o territorios necesiten.
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Los cursos arrancaron el 22 de octubre y tienen una duración de siete meses para que al final del programa, los técnicos de extensión agraria se encuentren en condiciones de contribuir efectivamente al logro de una agricultura sostenible y el desarrollo de sus comunidades.
Los mismos podrán replicar los conocimientos al ponerlos en práctica, formando a otros técnicos y a una sucesión de líderes que sostengan y multipliquen los beneficios de las intervenciones territoriales, explicaron desde el IICA.