Tal y como se había dado ya en la designación del saliente ministro de Agricultura y Ganadería Rodolfo Friedmann, los sectores afines habían pronunciado la necesidad de que el titular del ministerio sea una persona que conozca la actividad agropecuaria, con su salida envuelta en hechos de corrupción se vuelve a reiterar la incertidumbre.
En ese afán, desde la Asociación Rural del Paraguay (ARP) reiteran dicha petición constante, de que la cartera competente a la agroganadería esté liderada por alguien que provenga del sector, sea o no político, pero que los conozca.
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“Lo que nosotros queremos es que el que sea nombrado como futuro ministro de MAG provenga del sector, si es técnico mejor, pero si es político, que sea uno que conozca la actividad, alguien con quien podamos tener un trato hablando de las cosas que ambos entendemos”, aseveró Pedro Galli, presidente de la ARP.
Señaló que no se pueden evitar los cambios en los ministerios, en lo que ellos no tienen incidencia, por lo que no pueden sugerir o insinuar posibles candidatos, ya que tampoco suelen ser consultados por las autoridades y tampoco pueden tomarse atribuciones que no corresponda, al tiempo de aclarar la intención, que por el bienestar de la agroganadería lo ideal sería una persona del sector.
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Las políticas deben sostenerse
En ese sentido, Galli acotó que por más cambios de ministros que se den, ya que son personas que vienen y van, son las políticas públicas en general y acciones para el porvenir agropecuario las que deben de quedar y sostenerse en el tiempo.
Por lo tanto, se vuelve imperiosa la necesidad de que el nuevo titular del MAG pueda mantener un relacionamiento con los sectores afines, a razón de intercambiar ideas y proyectos a favor de las políticas públicas nacionales del sector y de la actividad en sí, concluyó el representante de la ARP.