A 24 días de aprobarse la ampliación de garantía del Fogapy al 90%, y el incremento de la tasa de créditos menores a G. 100 millones al 12,5%, que suponía un salto en la ejecución para estas fechas, sucediendo totalmente lo contrario con un retroceso en los desembolsos de -62%, ya que en julio salieron al menos 3.267 garantías y en agosto 1.249, según el directivo de la Asociación de Emprendedores de Paraguay (Asepy).

“Ya son casi tres semanas de implementación de esta ampliación de la garantía al 90% y tasa del 12,5% para créditos menores de G. 100 millones, y la verdad que es inentendible este tema de por qué no se están liberando los créditos”, expresó a La Nación.

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Sobre alguna posible situación que se esté dando, Defelippe indicó que la explicación que reciben desde la AFD es que los propios bancos se excusan de que la tasa todavía es muy baja y que eso no les conviene a ellos, y por otro lado justificaron ante el ministro de Hacienda que ya no hay demanda de créditos.

Lo cual es totalmente sorpresivo, porque asegura que es visible la necesidad enorme en todo el sector emprendedor, al tiempo de no ver que se esté accediendo masivamente a los créditos, porque los propios números del Fogapy lo demuestran, los datos están a la vista en la página de http://fogapy.gov.py, recalca.

“Pasen y comparen ustedes mismos la ejecución de Fogapy de junio, julio y agosto. Lamentablemente el sector financiero no está respondiendo. Los grandes ausentes son las cooperativas y los principales bancos”, arremate el directivo.

Y haciendo el conteo, la ejecución acumulada de Fogapy al 30 de junio es de 8.775 créditos otorgados, al 31 de julio 12.042, y hasta ayer al 26 de agosto llega a 13.501. Por ello, una de las hipótesis que sostienen desde Asepy es que las entidades financieras están haciendo brazos caídos y no quieren hacer uso de esta herramienta, esperando que se saque el tope de la tasa ya que va en contra de sus intereses.

A la vez, para el directivo es inentendible cómo los bancos más grandes son los que menos ejecutaron el Fogapy, ya que supuestamente no les “cierra” los números, pero a la vez, algunos lanzan un producto como “crédito personal” con condiciones muy buenas, señala Defelippe, lo cual es positivo que exista un producto así y tal vez sea un efecto indirecto del Fogapy que ayudó a modificar la oferta crediticia, estima.

Si bien entienden que debe prevalecer el libre mercado, consideran a la vez que podría ser discutible teniendo en cuenta el contexto de pandemia que se vive, por lo que habría que ver por un lado que se siga operando en libre mercado, pero también que las organizaciones o entidades financieras se adapten a su rol social.

Lo que tampoco significa que tengan que ir a pérdida, pero la expectativa es que puedan servir como elemento de apoyo y de oxígeno financiero para las mipymes, considerando que existe una garantía del 90%.

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Así, tras una reciente reunión con gremios y autoridades, sugirieron dos medidas urgentes. Primero, habilitar un canal para recepción de denuncias por abusos o malas prácticas de algunas entidades financieras, y segundo; establecer una meta Fogapy de modo a que al menos la mitad de las mipymes con RUC pueda acceder al crédito.

Hay que señalar que en Paraguay existen 260.000 mipymes con RUC, por lo que creen que al menos 100.000 de estas deben acceder a un crédito puente para lograr sostener empleos y colaborar con la reactivación económica, pero no sólo falta mejorar la ejecución, también faltan fondos, aseveró Defelippe.

En dicho sentido, mencionó que desde Asepy están apoyando a las mipymes y emprendedores a acceder al Fogapy, a través de un equipo de asesores financieros voluntarios de asociación, cuya asesoría puede ser solicitada en www.asepy.org/creditocovid. A la fecha ayudaron a 57 mipymes a alcanzar créditos por valor de hasta G. 3.000 millones.