El colapso de la actividad económica doméstica de Paraguay se encuentra entre los mayores a nivel regional, según el economista Carlos Fernández Valdovinos, quien realizó un nuevo análisis comparativo en base al IMAEP, excepto el agro y las binacionales y posteó en su cuenta de Twitter, utilizando como referencia abril, un mes después del inicio de pandemia, cuando la retracción de la economía fue en torno del 20%, frente a los niveles observados en febrero.

Otras economías como Argentina incluso arrojaron un retroceso del 22,8% en las actividades productivas en el mismo periodo citado, al igual que Colombia en el orden del -21,6%, mientras que Chile y Brasil en un -6,6% y -15,2% respectivamente.

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Pero pese a ello, la recuperación inicial resultó relativamente rápida, ya que el “rebote” de la actividad productiva luego de tres meses, es una de las más fuertes a nivel regional, teniendo en cuenta que a junio se llegó a 2/3 del “gap” diferencial o brecha, se desplomó con los precios a la baja con respecto al pico de producción de febrero, explicó Fernández Valdovinos.

No obstante, en su apreciación aclara que no sería sensato esperar que la fortaleza del “rebote” se comporte de la misma forma en los próximos meses, y que tampoco tales buenos resultados macros, pueden extrapolarse a todos los sectores micros, ya que existen algunos en donde la recuperación ni siquiera ha comenzado, explica.

El buen comportamiento en especial en el segundo trimestre, frente al mismo periodo del 2019, se dio en los de servicios de telefonía móvil en un 11%, en gran medida por el aumento de uso de datos, materiales de construcción en un 5,8%, y rubros de supermercados y distribuidoras en un 1%, mientras que lo que aún no se recuperaron en especial son las grandes tiendas con pérdidas del 29%, venta de vehículos que cayó 27,4%, venta de combustibles -22,4%, equipamiento para el hogar menos 10,5% y productos químicos farmacéuticos en menor medida cayeron 7,3%.

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Por lo tanto, antes que políticas contracíclicas “agregadas”, es más urgente establecer políticas públicas más focalizadas que brinden apoyo real a las personas y empresas, que hasta el momento no pudieron iniciar el proceso de recuperación de sus actividades e ingresos, precisó.