Paraguay registra una leve mejora en su calificación en el Índice de Libertad Económica y ascendió este año del puesto 85 al número 80, de entre 180 países, en el ranking mundial, manteniéndose así en la categoría de economía “moderadamente libre”. El país pasó de una puntuación de 61,8, sobre 100, en el 2019 a 63,0 en el 2020. Este aumento se debe a un mejor control del gasto gubernamental, de acuerdo con el informe presentando por el Instituto de Desarrollo del Pensamiento Patria Soñada (IDPPS) con datos de la Fundación Heritage.
El reporte señala que Paraguay se ubica en el puesto 15 del ranking regional, de entre 32 países, tres posiciones más respecto al año anterior y por encima del promedio regional. Argentina cuenta con 53,1 puntos, mientras que en el 2019 su calificación era 52,2 y Brasil pasó de una puntuación de 51,9 a 53,7 en la última evaluación.
El economista Fernando Rivarola mencionó que si bien los datos no contemplan la pandemia del COVID-19, reflejan las fortalezas y debilidades del país también en el contexto de la crisis sanitaria. Resaltó como una fortaleza importante la mejora del gasto público de la mano de la implementación del Presupuesto por Resultados, debido a que permite usar el presupuesto con más eficacia, según indicó.
Leé también: Instan a sectores público y privado a trabajar juntos para reanimar la economía
Rivarola sostuvo que la baja carga tributaria sigue siendo atractiva para los inversores, así como la salud fiscal que goza Paraguay y en la que se resalta la Ley de Responsabilidad Fiscal, si bien el año pasado no se cumplió el tope establecido debido al impacto por shocks externos.
Desafíos
“Los desafíos no pasan por la economía, sino por Estado de derecho, integridad gubernamental. Se percibe corrupción, se precisa de más eficacia judicial, por lo que el informe sugiere acciones concretas, ya que es imperante una reforma judicial”, expresó el profesional.
Por su parte, el director de Investigación de la Fundación Heritage, Anthony Kim, indicó que Paraguay consolidó en los últimos tiempos “su condición de economía moderadamente libre”, de forma gradual, pero segura. En ese sentido, mencionó la implementación de reformas económicas que contribuyeron a la expansión de la economía y la estabilidad.
“A futuro, la adopción de políticas más proactivas que aumenten la libertad económica contribuirá a un mejor desarrollo tanto en el frente económico como en el político”, expresó.
Así también, Kim sostuvo que el país tiene como tarea seguir impulsando reformas que permitan ampliar y profundizar su compromiso con las leyes, el gobierno limitado y la apertura de mercados, que favorecerán para un crecimiento económico y desarrollo del país duraderos.
Derechos de propiedad
En el informe también resaltan mejoras en los derechos de propiedad, efectividad judicial, carga tributaria, así como la libertad monetaria y la libertad comercial, que fueron contrarrestadas por los descensos en integridad gubernamental, el gasto público, salud fiscal, libertad empresarial y libertad laboral; se mantienen sin cambios la libertad de inversión y financiera.