El ministro de Hacienda Benigno López, en contacto telefónico con Universo 970 AM y GEN, habló esta mañana sobre los aspectos de la deuda pública y el tope del déficit fiscal, al tiempo de confirmar que la próxima semana sería presentado ante el Congreso el proyecto para el nuevo crédito de los US$ 350 millones necesarios para el plan de reactivación económica.

“Es muy probable que para la semana que viene ya se tenga culminado el proyecto, lo que nos está demorando son las consideraciones legales que se quieren incorporar, como los incentivos para el sector informal y aquí hablamos del Pytyvõ 2.0, con lo que se pretende formalizar a más de 700 mil trabajadores”, expresó.

Otros aspectos que están retrasando la presentación del proyecto son las discusiones sobre el uso o la ejecución de la línea de crédito actual, por lo que están pensando en redistribuir el plan, porque al parecer en el Congreso existe una intención de agotar la línea, por lo que no tienen una claridad sobre el punto.

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Ante la consulta de qué considera él, respondió que sería prudente resguardarlo para Salud, ya que es una cartera que no se puede quedar sin recursos, por lo que hay que destinarle un recurso importante para cualquier eventualidad para lo que reste del año, teniendo en cuenta el curso de la pandemia, que no se sabe con exactitud cómo avanzará en los próximos meses.

Por lo tanto, no le parece la idea de quedarse sin fondos y solo destinar o redistribuir a otros sectores lo que aún no fue ejecutado de los US$ 1.600 millones, refiriéndose para mantenerlo como una especie de reserva para la cartera sanitaria.

En dicho contexto, López mencionó que también se está evaluando la posibilidad de redireccionar el sobrante para la ampliación de la cobertura del Fondo de Garantía para las Pymes (Fogapy), teniendo en cuenta que no fue aprobado el proyecto de crédito del Fondo Monetario Internacional (FMI).

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En cuanto a la deuda acumulada, habló de que hay diferencias con relación a los créditos de los multilaterales, parte aún en negociación en el Congreso, frente a los bonos emitidos. Los créditos serán ejecutados en etapas, a medida que se concreten las licitaciones y se certifiquen las obras e irá impactando en el tiempo, mientras que los bonos podrían impactar al día siguiente de ser emitidos.

“A todos nos preocupa la deuda, pienso que todas las preocupaciones son sinceras, pero la pregunta es con qué armas llegamos a hacer frente a esta crisis, sobre todo en la contención social. No me preocupa tanto la deuda de las multilaterales, porque es mucho más manejable, ya que depende mucho de la ejecución, me preocupa más la de los bonos”, aseveró.