La Asociación de Restaurantes del Paraguay (ARPY) está más que expectante al tratamiento que tendrá mañana en la Cámara de Senadores la ley de emergencia a los sectores gastronómicos, hoteleros, entretenimientos y eventos para todo el territorio nacional.
Una de las acciones que presenta esta ley es la modernización y simplificación del sistema tributario, así como medidas temporales de exoneración en impuestos.
Entre las medidas atenuantes que se pretenden establecer se encuentra la reducción de la tasa del impuesto al valor agregado para el alquiler de inmuebles destinados a estos rubros y para pagos realizados por clientes por servicios recibidos.
Asimismo, el texto de la norma sometido a consideración prevé la exoneración del cincuenta por ciento en las facturas por el servicio proveído por la Administración Nacional de Electricidad (Ande), a los emprendimientos de los sectores afectados y la reducción en los aportes obligatorios al Instituto de Previsión Social (IPS).
“Nosotros habíamos presentado una nota con varias peticiones al Poder Ejecutivo, que no tuvieron respuesta. No obstante, esa carta llegó hasta el senador Stephan Rasmussen, quien se encargó, con la colaboración del diputado Sebastián García, de impulsar el proyecto de ley, el cual tuvo la aceptación de todas las bancadas para su aprobación”, manifestó Oliver Gayet, titular de la ARPY.
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De aprobarse el presente proyecto, el Poder Ejecutivo deberá elaborar una lista de las empresas que están al día con sus obligaciones legales, las que podrán acogerse al régimen extraordinario establecido en la normativa sugerida. Las medidas propuestas tendrían una validez de 12 meses a partir de su puesta en vigencia, de ser aprobada.
Sector en crisis
Sobre la situación actual por la que atraviesa el sector gastronómico, Gayet indicó que la crisis se agudiza cada vez más.
“No hay gente asistiendo a los restaurantes y el servicio de delivery cayó. Manejamos algunas hipótesis como que la gente está con miedo para asistir a los locales; además, hay mucha gente con menos capacidad económica y el punto tres es la cantidad de delivery informal que ha aparecido”, dijo.
Agregó que siguen habiendo restaurantes que están cerrando o van hacia ese destino. “Las ventas que hoy tenemos, si comparamos con los resultados del año pasado, apenas se acercan al 15%. Todo está muy difícil”, dijo.
Añadió que incluso algunos empleados se están declarando “despedidos” y recurren al Ministerio de Trabajo para que estos intervengan en una indemnización. “Ni siquiera aceptan negociar algunos y financieramente ningún restaurante está con capacidad”, sostuvo.
Aseguró que todos los locales que forman parte de la asociación cumplen estrictamente los protocolos sanitarios y que hasta la fecha no se ha registrado un solo caso de coronavirus positivo.
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