El Colegio de Contadores del Paraguay manifestó su desacuerdo con el alcance del decreto N° 3.576, que los excluyó de la lista de exceptuados impidiendo que vuelvan a abrir sus oficinas durante esta cuarentena inteligente. En conferencia de prensa, representantes del gremio informaron esta mañana que hicieron sus reclamos a través de notas remitidas al viceministro de Tributación y al ministro de Salud.
“Queremos comunicar a los colegas que no nos encontramos dentro de lo que es el artículo 3, inciso 17 del decreto 3.576, por lo que exigimos ser los colaboradores del Gobierno para las recaudaciones”, dijo César Martíntez, titular de la citada agremiación.
Expresó que los contadores se consideran “los brazos ejecutores de los ingresos”, por lo que exigen ser habilitados para poder atender a sus clientes. “No estamos exceptuados para poder abrir nuestras oficinas que para nosotros es esencial, para poder realizar las liquidaciones y que nuestros contribuyentes puedan pagar al Fisco”, añadió.
Explicó que precisan que los auxiliares contables comiencen a trabajar, cumpliendo todos protocolos sanitarios, tales como el uso de barbijos, lavado constante de manos y respetando el distanciamiento físico.
“Estamos elevando nota al viceministro de Tributación y al ministro de Salud que está capitaneando de la mejor forma esta situación difícil que estamos viviendo, pero nosotros también necesitamos trabajar y facturar para pagar a nuestros empleados y auxiliares y que el Gobierno reciba los ingresos fiscales”, acotó.
A su criterio, el trabajo a domicilio de los contadores implicará un mayor riesgo para la propagación del nuevo coronavirus, por lo que insistió en la necesidad de abrir las oficinas para que los auxiliares puedan realizar los trabajos de carga de factura de los clientes.
“Apelamos al ministro Julio Mazzoleni y pedimos que podamos circular en todo el territorio nacional”, concluyó.