La crisis sanitaria, que desencadenó la propagación del COVID-19, impacta en varios estamentos atacando fuertemente también al precio de la carne paraguaya, ya que es sabido que a consecuencia de la emergencia de salud muchos de los países, entre los que se encuentran los principales compradores de la proteína roja local, están en cuarentena. Varios de estos, los restaurantes, cadenas de hoteles, centro de entretenimientos cerrados, y más de 90 países se ven afectados por el confinamiento como medida para luchar contra el virus, lo que repercute en el precio de los productos.
Y teniendo en cuenta que en gran parte están dentro de los principales destinos de exportación de la carne paraguaya, es que se da una relación directa entre el precio y la baja demanda, más el golpe económico que empieza a sentir la industria cárnica local. Cabe recordar que los compradores actuales de mayor volumen son los mercados de Rusia, Chile e Israel.
Al respecto, la Cámara Paraguaya de Carnes (CPC) señala a través de un comunicado que la industria cárnica del Paraguay necesita exportar un buen volumen para que pueda sostener su funcionamiento, a lo que afecta directamente a más de la caída de la demanda internacional, los protocolos sanitarios del COVID-19, que hacen que las plantas estén trabajando solo a un 50% de su capacidad.
En ese sentido, el presidente de la CPC, Korni Pauls, explicó que es la demanda internacional la que afecta el precio de toda la cadena, tanto del animal como de la góndola. En cuanto a la producción local, indicó que siguen las faenas para abastecer la demanda, pero en un menor volumen y que cuando aumenten las exportaciones, también aumentará la oferta de cortes populares para el mercado local, bajando los precios para el consumidor final.
“Esta situación también afecta el precio del ganado que ya están bajando, porque las exportaciones a los principales destinos están afectadas por la crisis. En el caso de Israel, estamos finalizando los protocolos sanitarios para que los rabinos puedan venir el próximo mes para la faena kosher y reactivar las exportaciones a este país”, señaló Pauls.
Reiteró que los principales mercados como Rusia, Chile, Israel y Brasil están todos en cuarentena con sus hoteles, restaurantes y aerolíneas sin trabajar, y en el caso del destino ruso, incluso, más agravada su situación por el desplome del petróleo y del gas. Es así que los productores locales esperan que una vez levantadas las medidas, la industria de la carne pueda ser uno de los primeros en recuperarse, dada su importancia en la cadena alimentaria.
En dicho contexto, es de importancia mencionar que el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) informó recientemente que unas 20.000 toneladas peso carcasa será la reducción de las exportaciones de carne bovina producida en Paraguay. Se estima que los envíos al exterior sumarían 330.000 toneladas, un 5,7% menos frente a las proyecciones de enero del 2020 y octubre del 2019, cuando en ambos momentos los estimó en 350.000 toneladas.
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