- Washington, Estados Unidos. AFP.
Estados Unidos anunció que Rusia y Ucrania acordaron detener los ataques en el Mar Negro, tras negociaciones celebradas en Arabia Saudita, y ofreció a Moscú aliviar la presión sobre exportaciones agrícolas como primer incentivo concreto.
Rusia y Ucrania acordaron “garantizar la seguridad de la navegación, eliminar el uso de la fuerza y prevenir la utilización de buques comerciales con fines militares en el Mar Negro”, informó la Casa Blanca en dos declaraciones separadas que detallan las conversaciones de los últimos días en Arabia Saudita.
Con respecto a Ucrania, Estados Unidos se comprometió a “apoyar los esfuerzos para el canje de prisioneros, la liberación de civiles y el regreso de los niños ucranianos desplazados por la fuerza”.
Rusia, objeto de numerosas sanciones, puede contar con el apoyo de Washington para “restaurar el acceso” al mercado “mundial de exportaciones de productos agrícolas y fertilizantes, reducir los costes de los seguros marítimos y mejorar el acceso a los puertos y los sistemas de pago para estas transacciones”.
DETALLES Y CONDICIONES
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, expresó su preocupación. “Creemos que es un debilitamiento de las sanciones”, declaró.
Moscú condicionó el acuerdo del Mar Negro a la flexibilización de las restricciones a sus exportaciones agrícolas.
La Presidencia rusa insistió el martes que el acuerdo con Ucrania solo entraría en vigor cuando se hayan “levantado” las restricciones al comercio de granos y fertilizantes rusos.
También afirmó haber acordado con Washington que la tregua de 30 días sobre ataques a instalaciones energéticas –anunciada la semana pasada por el presidente ruso, Vladimir Putin, y su par norteamericano, Donald Trump–, se aplicará sobre todo a refinerías, gasoductos y centrales eléctricas.
Durante las negociaciones, Estados Unidos reiteró que Trump quiere imperativamente “poner fin a las matanzas en ambos bandos del conflicto” como un “paso necesario para lograr una paz duradera”.
Zelenski afirmó que “es demasiado pronto para decir que (el acuerdo) funcionará”, pero sostuvo que es “un paso correcto”.