- Washington, Estados Unidos. AFP
El cohete Falcon 9 de la empresa SpaceX se mantendrá en tierra mientras la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) investiga por qué su propulsor de primera fase volcó y explotó mientras intentaba aterrizar tras su último lanzamiento, anunció esa agencia ayer miércoles.
“Se inició una investigación destinada a mejorar aún más la seguridad pública, determinar la causa que originó el incidente e identificar acciones correctivas para evitar que vuelva a suceder”, señaló la FAA.
“El regreso del cohete Falcon 9 a volar depende de que la FAA determine que cualquier sistema, proceso o procedimiento relacionado con la anomalía no afecta la seguridad pública”, agregó el organismo. La rara e inesperada falla del Falcon 9 se produjo después de que el cohete pusiera en órbita el último lote de 21 satélites proveedores de internet Starlink durante un lanzamiento efectuado a primera hora de la mañana.
Una transmisión en la web de la compañía del magnate Elon Musk mostró la primera fase del aparato, que normalmente enciende sus propulsores para lograr un aterrizaje vertical preciso, en momentos en que se inclinaba y explotaba en cuanto descendía sobre un dron en la costa del estado de Florida (sureste).