- AFP
Una gran ofensiva de Israel en Rafah, Gaza, provocaría “caos” y “anarquía”, pero no eliminaría a Hamás, advirtió ayer domingo el jefe de la diplomacia estadounidense Antony Blinken, quien señaló que la guerra mató más civiles que miembros del movimiento islamista palestino.
El plan de Israel en Rafah “corre el riesgo de provocar enormes daños en la población civil sin resolver sin embargo el problema”, estimó el secretario de Estado en el canal NBC.
“Seguirá habiendo miles de miembros armados de Hamás”, incluso con una intervención en Rafah, declaró Blinken. Una operación israelí en Rafah podría crear “el caos” y la “anarquía” y, tras cierto tiempo, el regreso de la organización islamista, insistió. “Hemos visto a Hamás regresar a las zonas que Israel liberó en el norte, incluso en Jan Yunís”, ciudad en ruinas cerca de Rafah, aseguró el responsable estadounidense.
Estados Unidos amenazó de manera pública con suspender la entrega de algunas categorías de armas a Israel, por ejemplo, buses de artillería, si este país lanza una gran ofensiva en la ciudad sobrepoblada de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, a la que se opone el presidente Joe Biden.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, pidió este domingo un alto el fuego “inmediato” en la Franja de Gaza, que el ejército israelí sigue bombardeando tras siete meses de guerra que dejan ya, según Hamás, más de 35.000 muertos.