Brasilia, Brasil. AFP.
Un juez de Brasil anuló las pruebas provenientes de confesiones de ejecutivos del gigante Odebrecht, implicado en el escándalo de corrupción Lava Jato, y afirmó que la prisión del presidente Lula, ligada a la misma investigación, fue “uno de los mayores errores judiciales de la historia” del país.
En su decisión, a la que AFP tuvo acceso, el juez del Supremo Tribunal Federal José Antonio Dias Toffoli consideró que las pruebas provenientes de confesiones de ejecutivos realizadas en el marco de un acuerdo de colaboración firmado en 2017 por Odebrecht son “inutilizables” por “cualquier jurisdicción”.
El acuerdo preveía igualmente el pago de una multa de 2.600 millones de dólares a Estados Unidos, Suiza y Brasil. En el gigante latinoamericano, Odebrecht fue acusada por la Fiscalía de participar junto a otras empresas, políticos e intermediarios, de una red de sobornos y contratos amañados con la estatal Petrobras.
La red, destapada en 2014 por la investigación llamada Lava Jato, se convirtió en uno de los mayores escándalos de corrupción del país. Las acusaciones contra la empresa trascendieron en Brasil, con causas judiciales abiertas en otros países latinoamericanos y africanos, y decenas de políticos prominentes salpicados por acusaciones de corrupción, entre ellos, varios expresidentes.
El juez Dias Toffoli denunció en su despacho “las graves consecuencias” de pruebas obtenidas “al margen de la ley (...) para cientos de personas investigadas o procesadas en Brasil y en el extranjero”. El magistrado integra el máximo tribunal desde 2009, cuando fue nombrado por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, en su segundo mandato.
Lula pasó 18 meses preso, entre 2018 y 2019, tras ser condenado por corrupción y lavado de dinero en la causa Lava Jato, bajo acusación de recibir sobornos de otro gigante brasileño de la construcción OAS. Pero sus condenas fueron anuladas por otro juez de la Corte Suprema en marzo de 2021. Tres meses después, el exjuez de primera instancia Sergio Moro, que condenó a Lula a prisión, fue declarado “parcial” por la Corte Suprema.