- Pekín. AFP.
Varias ciudades chinas flexibilizaron ayer viernes las medidas anticovid que provocaron protestas en todo el país y el propio presidente, Xi Jinping, dio el visto bueno a esas iniciativas alegando que la actual ola de la pandemia es “menos letal” que las anteriores.
“Ahora la epidemia en China es básicamente de ómicron, menos letal, y (...) eso abre la posibilidad de más apertura en las restricciones”, de dijo Xi el jueves en Pekín al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, según funcionarios europeos.
El descontento por la draconiana estrategia sanitaria del gobierno generó el fin de semana pasado protestas de una magnitud inédita desde hacía décadas en el país comunista. Las autoridades reaccionaron rápidamente para sofocar el movimiento, con un importante despliegue policial y una vigilancia reforzada en redes sociales.
Las protestas, según Xi, se deben a la “frustración” de la población, y sobre todo de los jóvenes, tras tres años de pandemia. Los chinos “están frustrados”, dijo Xi. “Fueron principalmente estudiantes o adolescentes en la universidad. Esa es la explicación que se dio”, contó un alto funcionario europeo, que habló bajo condición de anonimato.
China es la última gran economía que mantiene la estrategia de “cero covid”, con confinamientos, extensas cuarentenas y test masivos para erradicar los focos de contagio apenas aparecen. Pero la vice primera ministra Sun Chunlan aseguró el miércoles ante la Comisión Nacional de Salud que la forma de encarar el virus se encontraba “ante nuevas circunstancias”.
Figura central de la estrategia china ante la pandemia, Sun insistió en que la variante ómicron era menos peligrosa y afirmó que la tasa de vacunación había mejorado, según la agencia oficial de noticias Xinhua. Tras las protestas, varias ciudades empezaron a flexibilizar las restricciones y algunos miembros del gobierno dieron señales de un posible aligeramiento a nivel nacional.