Con una variedad de actos, exposiciones y marchas, una Argentina en plena crisis recordó ayer a Eva Duarte, universalmente conocida como Evita, esposa del tres veces presidente Juan Perón y mítica protectora de los “descamisados”, en el 70 aniversario de su muerte.
Frente a la sede del ministerio de Desarrollo Social, cuya fachada está decorada con un perfil gigante de Evita, fallecida de cáncer a los 33 años, se concentraron los sindicatos. Allí, el 22 de agosto de 1951 una manifestación de dos millones de personas le pidió secundar la fórmula presidencial con Perón, que buscaba la reelección.