Ginebra, Suiza. AFP.
La Organización Mundial de la Salud activó el sábado su máximo nivel de alerta para tratar de contener el brote de viruela del mono, que ha afectado a casi 17.000 personas en 74 países.
“He decidido declarar una emergencia de salud pública de alcance internacional”, la llamada USPPI, dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus en una rueda de prensa, afirmando que el riesgo en el mundo es relativamente moderado, salvo en Europa, donde es alto.
Tedros explicó que de momento el brote “se concentra en hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y en particular en los que tienen múltiples parejas, lo que significa que se puede detener con estrategias adecuadas en los grupos adecuados”.
“Es esencial que todos los países trabajen estrechamente con las comunidades de hombres que tienen relaciones sexuales con hombres” para proporcionar asistencia e información, insistió el jefe de la OMS.
Al mismo tiempo, advirtió del riesgo de discriminación, afirmando que “el estigma y la discriminación pueden ser tan peligrosos como cualquier virus”.
Desde principios de mayo, cuando se detectó por primera vez fuera de los países africanos donde es endémica, la enfermedad ha afectado a más de 16.836 personas en 74 países, según los centros de control y prevención de enfermedades (CDC) de Estados Unidos, a fecha de 22 de julio.
Aunque las autoridades sanitarias del Reino Unido, uno de los epicentros del brote, informaron de un descenso del ritmo de infecciones, el número de casos está aumentando rápidamente en todo el mundo.