Bruselas, Bélgica. AFP.
La reanudación de las exportaciones de granos desde Ucrania es una “cuestión de vida o muerte” y la Unión Europea tiene la “esperanza” de que se alcance un acuerdo esta semana para desbloquear el puerto de Odesa, indicó ayer lunes el jefe de la diplomacia europea Josep Borrell.
“La vida de (...) decenas de miles de personas depende de este acuerdo” que es negociado entre Rusia, Ucrania, Turquía y Naciones Unidas, explicó Borrell al llegar a Bruselas para una reunión de ministros de Relaciones Exteriores de la UE consagrada a la guerra en Ucrania.
Las negociaciones buscan concretar la salida por el Mar Negro de unos 20 millones de toneladas de cereales acopiados en silos ucranianos, en particular en Odesa (sur), y facilitar la exportación rusa de granos y fertilizantes.
Moscú afirma que las sanciones impuestas por la UE y Estados Unidos tras la invasión de Ucrania le impiden exportar esos bienes, algo que Washington y Bruselas niegan asegurando que sus medidas no fueron dirigidas a los alimentos.
Ucrania es uno de los principales exportadores mundiales de trigo y otros cereales. La Unión Europea quiere acentuar su presión sobre Rusia con nuevas sanciones y, al mismo tiempo, dar más apoyo financiero y militar a Ucrania, dijo Josep Borrell. La Comisión Europea presentó el viernes nuevas medidas contra Moscú, entre ellas un embargo de las compras de oro ruso.
En tanto que el ministro de Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, pidió ayer lunes a sus homólogos de la Unión Europea que no caigan en la “trampa” de ceder ante el presidente ruso, Vladimir Putin, en cuanto a las sanciones contra Rusia. “El verdadero objetivo de Putin es el empobrecimiento de Europa. Quiere poner a la opinión pública en contra de los gobiernos de turno, con la esperanza de reemplazarlos con fuerzas radicales que serían más favorables a Rusia”, advirtió Kuleba en un discurso ante los cancilleres reunidos en Bruselas.