El ejército ruso confirmó ayer que bombardeó con “misiles de alta precisión” un importante arsenal cerca de Odesa donde el gobierno ucraniano almacenaba armas entregadas por los países occidentales. “Las fuerzas armadas rusas neutralizaron hoy con misiles de alta precisión y largo alcance un terminal logístico en un aeródromo militar cerca de Odesa donde se almacenaban grandes cantidades de armas extranjeras entregadas por Estados Unidos y los países europeos”, indicó el ejército ruso mediante un comunicado.
Alrededor de 5 fallecidos y 18 personas resultaron heridas durante los bombardeos rusos contra la ciudad portuaria de Odesa, en el sur de Ucrania. Esto, según lo manifestado por el jefe de Gabinete de la Presidencia ucraniana. “Cinco ucranianos muertos y diez y ocho heridos, y solo son los que hemos logrado encontrar hasta ahora”, manifestó Andrii Yermak mediante Telegram, esta mañana.
Agregó que es probable que ese número vaya en aumento. Además confirmó que entre las víctimas fatales había “un bebé de tres meses”. La fuerza aérea de Ucrania destacó en Facebook que las fuerzas rusas dispararon una serie de misiles desde bombarderos Tu-95 sobre el mar Caspio.
Dos misiles impactaron en una instalación militar y dos en edificios residenciales. Otros dos fueron destruidos por el sistema de defensa antiaérea, según la fuerza aérea. “El único objetivo de los ataques de misiles rusos contra Odesa es el terror”, afirmó en Twitter el jefe de la diplomacia ucraniana, Dmytro Kuleba, quien pidió levantar “un muro entre la civilización y los bárbaros que atacan ciudades pacíficas con misiles”.