Más de 5.600 personas fueron desalojadas de sus hogares y más de 50 municipios están en situación de emergencia debido a las intensas lluvias e inundaciones en los estados brasileños de Bahía (noreste) y de Minas Gerais (sureste), informaron ayer las autoridades.
Las regiones más arrasadas están en el sur de Bahía, donde hay 3.740 personas desplazadas y en total unas 70.000 afectadas, cinco fallecidos y 175 heridos, reportó la Defensa Civil de la región tras casi una semana de un temporal que deja viviendas inundadas, ríos desbordados, vías y puentes destruidos y algunas localidades incomunicadas.
El gobernador bahiano Rui Costa declaró la situación de emergencia en al menos 30 municipios debido a las lluvias torrenciales, que golpearon especialmente a las ciudades de Itamaraju, Jucuruçu, Porto Seguro, Prado y Teixeira de Freitas. “Progresivamente, con la reducción del agua, iniciaremos la recuperación de las ciudades y la reconstrucción de muchas casas perdidas en lugares más altos”, afirmó el gobernador Costa desde un centro de operaciones de rescate.