El doctor Anthony Fauci, principal asesor médico del presidente Joe Biden, dijo ayer domingo que no espera que Estados Unidos vuelva a los confinamientos, a pesar de los crecientes riesgos de infecciones por covid-19 que plantea la variante Delta. “No creo que vayamos a ver confinamientos”, dijo Fauci, que también es director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, en el programa “This Week”, de la cadena ABC.
“Creo que tenemos un porcentaje suficiente de personas en el país –no lo suficiente como para aplastar el brote–, pero creo que lo suficiente como para permitirnos no llegar a la situación en la que estábamos el invierno pasado”, dijo. Si bien Fauci no cree que Estados Unidos tenga que volver a encerrarse como el año pasado, advirtió en ABC que “las cosas van a empeorar” a medida que la variante Delta siga extendiéndose. “Tenemos 100 millones de personas en este país que pueden vacunarse y que no lo están haciendo”, dijo.
Fauci argumentó que los no vacunados están afectando a otros porque están “permitiendo la propagación y la extensión del brote”, y contraatacó a los críticos que dicen que vacunarse o no es una decisión individual. Fauci dijo que los que deciden no vacunarse en realidad están afectando a los derechos de los estadounidenses especialmente propensos a la infección porque están “invadiendo sus derechos individuales” al “hacerlos vulnerables”.
La variante Delta representaba al menos el 83% de los casos de covid-19 a nivel nacional, estimaron los CDC la semana pasada. El sábado, Florida marcó un récord de casos diarios, pero el gobernador Ron DeSantis adelantó: “No habrá cierres, no habrá cierres de escuelas. No habrá restricciones ni mandatos en el estado de Florida. Los floridanos han tenido y seguirán siendo libres de elegir lo mejor para ellos y sus familias”. El republicano, conocido por su oposición a la política de los CDC y de Fauci, al que acusa de querer imponer una “distopia”, no ha tomado medida alguna para hacer frente al repunte de la pandemia en el estado. De acuerdo con el decreto que publicó, serán los padres los que decidan si sus hijos van a la escuela con mascarilla, pero no habrá una orden oficial.