La variante Delta del coronavirus arrecia en el mundo, obligando el sábado a las autoridades a endurecer las restricciones sanitarias con confinamientos locales en China, a desplegar soldados en Australia para hacer respetar las medidas y a prolongar el estado de emergencia en Japón en plenos Juegos Olímpicos. Dos nuevas regiones en China, incluyendo una ciudad de 31 millones de habitantes, registraron focos epidémicos, en medio del peor brote de coronavirus en los últimos meses en el país. Japón, una semana después del inicio de los Juegos Olímpicos, extendió su estado de emergencia hasta fines de agosto en Tokio y lo amplió a otros cuatro departamentos.
El número promedio de nuevos casos diarios a nivel mundial aumentó un 10% la última semana, según un recuento de la AFP, en gran parte debido a la variante delta. Si bien la región de Asia y el Pacífico se ha visto muy afectada, con un aumento de los casos diarios de 61% en Vietnam y Japón, los países occidentales también se enfrentan a aumentos repentinos, y Estados Unidos y Canadá experimentan un 57% más de infecciones. La OMS advirtió que la variante delta podría desencadenar más brotes en una zona de alto riesgo que se extiende desde Marruecos hasta Pakistán, donde las tasas de vacunación son bajas.
En Japón el número de casos sigue siendo bajo en comparación con otros países, con 3.300 nuevas infecciones reportadas en Tokio el viernes, pero los expertos dicen que el sistema médico corre el riesgo de verse saturado por el bajo nivel de vacunación: solo una cuarta parte de la población recibió dos dosis. En Australia, la policía de Sídney contará con la ayuda de 300 soldados para hacer cumplir las restricciones en la ciudad, donde el número de contagios batió un récord el jueves.
La variante delta del coronavirus es tan contagiosa como la varicela, probablemente genera una enfermedad peor que las anteriores y los casos entre vacunados pueden ser tan transmisibles como entre los no vacunados, según documentos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos divulgados por The Washington Post y verificados por la AFP. Por eso los estadounidenses, incluso vacunados, deben ponerse la mascarilla en zonas donde el virus circule mucho.