Amán, Jordania. AFP.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, terminó ayer miércoles en Jordania, donde se entrevistó con el rey Abdalá II, una gira por Medio Oriente que buscaba consolidar el alto el fuego entre Israel y el movimiento palestino Hamás. El diplomático estadounidense se reunió más temprano ayer con el presidente egipcio Abdel Fatah al Sisi, cuyo país ha desempeñado un papel clave para silenciar las armas en Gaza, antes de volar a Jordania, donde la mitad de los 10 millones de habitantes tiene orígenes palestinos.
“El cese del fuego era importante”, subrayó Blinken a los periodistas, luego de su encuentro con el rey jordano. “Pero vemos el cese del fuego no como un fin, sino como el inicio de algo que debe construirse”, dijo. “Nuestras entrevistas hoy en El Cairo y en Amán, de hecho todo este viaje, reflejan una realidad fundamental”, agregó. “Si nosotros queremos evitar el regreso a la violencia de las últimas semanas, los países de la región deberán ayudarse y apoyarse”, dijo.
Por su lado, Abdalá II subrayó en un comunicado del Palacio real “la necesidad de preservar el estatuto histórico y jurídico de Jerusalén y no afectar sus lugares santos”, administrados por Jordania, país ligado por un tratado de paz con Israel y donde la mitad de los 10 millones de habitantes es de origen palestino.