Por Juan Carlos Dos Santos G. juancarlos.dossantos@gruponacion.com.py

Fotos: AFP

Un lejano conflicto, geográficamente hablando, centra la atención mundial, una vez más, en Israel y en su pequeña vecina Gaza, el enclave palestino con maravillosas playas ubicado a orillas del mar Mediterráneo. Desde hace varios días, se observa una violencia creciente que se agravó con el incesante envío de cohetes lanzados por grupos terroristas que controlan la Franja de Gaza.

Un lejano conflicto, geográficamente hablando, centra la atención mundial, una vez más, en Israel y en su pequeña vecina Gaza, el enclave palestino con maravillosas playas ubicado a orillas del mar Mediterráneo. Las imágenes de decenas de cohetes lanzados por los grupos terroristas que controlan la Franja de Gaza y que fueron difundidas de manera inmediata a través de usuarios en redes sociales, posicionó en la opinión pública mundial una situación de violencia que va escalando a medida que transcurren los días y las horas.

EVOLUCIÓN DE UN ENFRENTAMIENTO

Si queremos ponerle fecha de inicio a este conflicto, la apropiada oficialmente sería el 29 de noviembre de 1947, cuando mediante la Resolución 181/47 de la Organización de las Naciones Unidas, los países miembro dieron el sí a la creación de los Estados de Israel y Palestina, tras una partición del territorio del Mandato Británico, encargado del territorio tras la derrota del Imperio Otomano en la Primera Guerra Mundial. Lo demás ya es una secuencia conocida de varios eventos que fueron atando con más fuerza un nudo geopolítico, cultural y hasta religioso que resulta imposible desatar para todos quienes desean aportar su solución.

EL ¡NO! DE LOS PAÍSES ÁRABES

Los países árabes no aceptaron esta resolución de la ONU y así Egipto, Siria, Líbano, Irak, Yemen y Jordania se lanzaron a una aventura bélica el 15 de mayo de 1948, un día después que el Estado de Israel declarara oficialmente su independencia y las tropas británicas se marcharan de la región.

Esta y otras confrontaciones militares, algunas como la Guerra de los Seis Días en 1967 y la Guerra del Día del Perdón en 1973, todas con victorias de Israel, fueron dando forma a gran parte de las fronteras de este pequeño, pero poderoso país de la conflictiva región del Oriente Medio.

También los acuerdos de paz con Egipto en 1979 y con Jordania en 1993 contribuyeron a cerrar ciclos de conflictos con estos países vecinos.

Pero el problema con los árabes palestinos nunca fue solucionado, en gran parte por culpa de las propias autoridades palestinas, pero también por la acción de personas y grupos radicales que hacen de la inestabilidad su esencia para su propia supervivencia.

CISJORDANIA Y GAZA

Es así que hasta hoy los Territorios Palestinos lo conforman Gaza y Cisjordania, este último un territorio fragmentado donde localidades árabes palestinas comparten con colonias israelíes y ambos se encuentran separados por al menos 100 km de distancia uno del otro, gran parte dentro del territorio de Israel.

Gaza es una pequeña franja de tierra de 365 km2, ubicada entre Israel, Egipto y la costa del mar Mediterráneo. En ella viven alrededor de 2 millones de personas, todos árabes palestinos y está controlada de facto por el grupo terrorista islámico Hamás.

Este grupo, que al igual que el libanés Hezbollah que opera en Siria y el Líbano, tiene como objetivo destruir al Estado judío y crear un Estado Islámico Palestino en todo el territorio que hoy ocupa Israel.

VARIAS MECHAS PARA UN MISMO INCENDIO

La actual situación de confrontación desatada en la zona no es nueva y han habido grandes operaciones militares de mayores magnitudes como la Operación Plomo Fundido, llevada a cabo por la Fuerza de Defensa de Israel contra Hamás, en los años 2008 al 2009, o la operación Margen Protector en junio del 2014.

Para finales de este mes de mayo, los palestinos debían acudir a las urnas para elegir luego de 15 años un nuevo parlamento y un nuevo líder, que debía reemplazar Mahmoud Abbas, quien se mantiene en el cargo pese a sus 85 años de edad.

Las encuestas favorecían ampliamente a Hamás por lo que el motivo de la suspensión por parte de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) no logró convencer a nadie.

Ibrahim Alzeben, embajador palestino concurrente para el Paraguay, dijo a La Nación que la suspensión de las elecciones se daba por la prohibición por parte de Israel al no permitir que los árabes palestinos del sector oriental de Jerusalén tomen parte de estas elecciones.

CUATRO TERRENOS Y EL RAMADÁN

Las tensiones también fueron en aumento por un caso legal de larga duración que podría terminar con varias familias palestinas desalojadas de sus hogares para dar paso a colonos israelíes que, respaldados por un fallo judicial, quieren mudarse a ese lugar, que se trata concretamente de cuatro parcelas de tierra en el barrio Sheik Jarrah.

Las celebraciones del fin del Ramadán, el mes sagrado del Islam, en coincidencia en fecha y lugar con el Día de Jerusalén, una conmemoración nacionalista israelí, fue el detonante de los enfrentamientos callejeros en Jerusalén, ciudad que el lunes fue atacada con siete cohetes lanzados desde Gaza, hecho que caldeó de manera inmediata la situación.

Es que atacar a Jerusalén, la sagrada ciudad tanto para judíos, cristianos y musulmanes, parece tener otra connotación, aunque no se hayan producido más que daños materiales. Es frecuente escuchar en Israel, en ámbitos de política y seguridad que, cuando en el resto del Medio Oriente la situación se calienta, Jerusalén ya está en llamas.

ACCIÓN Y REACCIÓN

El lunes 10 de mayo, desde la Franja de Gaza, alrededor de 400 cohetes fueron lanzados hacia el sur de Israel, la mayor parte de los cuales fueron interceptados por el sistema de defensa israelí Cúpula de Hierro. La intensidad y frecuencia de los ataques de Hamás hacia territorio de Israel no disminuyeron desde ese día, y se estima que más de 1.000 misiles fueron lanzados hasta la tarde del miércoles.

Por supuesto, la represalia no se hizo esperar y los depósitos de armas y oficinas administrativas de Hamás en Gaza fueron blanco de los aviones israelíes mientras varios líderes de los grupos terroristas fueron literalmente cazados por drones, produciendo importantes daños a la estructura operativa, tanto de Hamás como de la Yihad Islámica Palestina (YIP).

Hasta el momento se ha reportado el fallecimiento de seis civiles y un militar, por el lado israelí, y más de 40 fallecidos por el lado palestino, entre ellos al menos 15 terroristas de Hamás como de la YIP, uno de los cuales era un ingeniero mecánico especializado en aerodinámica, responsable de la mejora tecnológica y mayor precisión de los cohetes utilizados por Hamás en esta operación.

En venganza por la muerte de sus principales líderes operativos, los terroristas amenazaron con terribles represalias, por lo que la Fuerza de Defensa de Israel se estaba preparando para ataques adicionales con cohetes de largo alcance, tras tomar en serio la advertencia.

El siguiente paso, aunque poco probable, sería el ingreso de militares israelíes en Gaza, algo que no sucedía desde el 2014 cuando se puso en marcha la operación Margen Protector, luego del ataque durante tres semanas continuadas, durante las cuales se lanzaron hacia Israel cerca de 250 proyectiles, casi cinco veces menos que los ataques de Hamás y YIP a Israel en los últimos tres días.

Graves disturbios en las ciudades con poblaciones mixtas, árabes y judías

Los disturbios entre árabes y judíos que tuvieron su origen en la ciudad de Lod, en el centro de Israel, se extendieron a varias ciudades del país con poblaciones mixtas, árabes y judías.

En la noche del martes fueron incendiadas algunas sinagogas y automóviles, así como varias tiendas resultaron dañadas por residentes árabes, quienes se amotinaron en la ciudad y se enfrentaron a los policías.

LINCHADO EN ACRE

Un ciudadano judío de unos 30 años se encontraba en estado crítico después de que una turba de manifestantes árabes lo atacara cerca de la plaza Egged en la ciudad de Acre. La policía dijo que el hombre fue atacado en su automóvil por manifestantes árabes israelíes armados con palos y piedras.

En otro incidente, según reporta el portal Jerusalem Post, en el suburbio costero de Bat Yam en la ciudad Tel Aviv, un grupo de manifestantes judíos marchó por las calles principales, destrozando negocios de propiedad árabe y atacando a los transeúntes.

SALVADO POR UN MOTOCICLISTA

Un motociclista vio que un hombre judío confundido con un árabe fue tomado en medio de la calle y golpeado, en un hecho que fue mostrado en vivo por los canales de TV que cubrían la zona.

Cuatro de los presuntos atacantes fueron arrestados mientras cantaban “muerte a los árabes” y “que se queme tu aldea”. La violencia y los disturbios judío-árabes estallaron en todo el país el miércoles en medio de los combates en curso entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza.

LÍDER DE LA OPOSICIÓN

Yair Lapid, líder de la oposición y quien busca formar gobierno actualmente en Israel, escribió en su cuenta de Twitter un mensaje en contra de estos hechos violentos y tildó de alborotadores y racistas, tanto a árabes como a judíos, que dieron pie a esta escalada de violencia en las ciudades israelíes de población mixta.

“La violencia no nos derrotará. La violencia no gobernará nuestras vidas. Los alborotadores de Lod y Acre no representan a todos los árabes de Israel, los alborotadores de Bat Yam y los miembros de la familia Lehavah y Kahana Jai son un grupo pobre de racistas que no representan a los judíos en Israel”, escribió indignado el líder opositor.