El director ejecutivo del laboratorio Moderna, Stéphane Bancel, informó en un comunicado que Israel autorizó el uso de la vacuna estadounidense. Indicó que la decisión del Ministerio de Sanidad israelí, que por el momento no se ha pronunciado oficialmente, “es un momento histórico para la historia de la empresa y en la lucha global contra el covid-19”.
“Esta es la tercera autorización regulatoria para la vacuna de Moderna contra el covid-19 y es la primera fuera de América del Norte. Quiero dar las gracias al Ministerio de Sanidad de Israel por sus esfuerzos, ya que su equipo ha trabajado incansablemente junto a los nuestros para garantizar una autorización adecuada de esta vacuna”, expresó Bancel.
Asimismo, subrayó que las autoridades israelíes solicitaron seis millones de dosis de la vacuna y manifestó que “se espera que los primeros envíos tengan lugar dentro de poco”, sin dar más detalles al respecto. Israel se suma así a Estados Unidos y Canadá, que dieron su autorización el 18 y el 23 de diciembre, respectivamente, al inmunizante de origen norteamericano.
TERCERA OLA
Israel se encuentra en medio de una campaña de inmunización iniciada en un drástico repunte de los casos ante una tercera ola de contagios. Su Ministerio de Sanidad confirmó ayer que durante las últimas 24 horas se han detectado 8.308 casos, la cifra más alta desde el 30 de setiembre, para un total de 450.116 desde el inicio de la pandemia. Durante los últimos cuatro días fallecieron 98 personas a causa del coronavirus, sumando un total de 3.445, mientras que en estos momentos hay 1.361 personas hospitalizadas, 764 de las cuales se encuentran en estado grave, según el diario israelí ‘Yedioth Ahronoth’.
AVANZADO RITMO DE VACUNACIÓN
Israel asegura que dos millones de personas habrán recibido una vacuna de covid-19 de dos dosis para finales de enero, un ritmo que el primer ministro Benjamin Netanyahu asegura que es el más rápido del mundo. A partir del 19 de diciembre, cuando Netanyahu recibió su primera dosis, Israel lanzó un agresivo impulso para administrar la vacuna fabricada por la alianza farmacéutica estadounidense-alemana Pfizer-BioNTech. La vacuna debe administrarse en dos inyecciones separadas, administradas con tres semanas de diferencia. “Estamos ralentizando el ritmo de las vacunas de la primera dosis, de modo que podamos almacenar una segunda dosis para todos aquellos que ya recibieron una primera inyección”, dijo Levy a la emisora pública KAN.
Pero agregó que alrededor de una quinta parte de la población de Israel, comenzando por los trabajadores de la salud y los mayores de 60 años, habrán recibido ambas inyecciones a finales de este mes.